Una protesta de alumnos, padres y docentes del Colegio Nuestra Señora del Huerto en repudio del despido del director, Alejandro Borsato, y de la docente María Inés Santidrián, dejó al desnudo algunos problemas de particular gravedad que tiene esa escuela. El aumento de la cuota escolar, el pago fraccionado del salario a los docentes y la decisión del colegio de suspender un viaje al cerro Champaquí que planeaban realizar anoche los alumnos de 4° año resultaron los detonantes de la situación. En medio de la agitada jornada, los padres acusaron a la madre superiora María Delia Ruso de no administrar de manera correcta la tesorería del colegio.
Desde bien temprano, alumnos y padres salieron a la calle y cortaron Juan Manuel de Rosas entre San Juan y San Luis. Allí pidieron explicaciones por el despido del director Borsato y de la docente Santidrián. Sólo fueron escuchados por supervisores del Ministerio de Educación, pero ante la presencia de los medios, desde el colegio se les pidió a las autoridades provinciales “no tomar demasiada exposición”.
Verónica Helmer, la nueva directora del establecimiento, dijo a Radio Dos que la decisión de los despidos la había tomado la congregación. “Este jueves se iban a informar los motivos, pero los alumnos no quisieron ingresar”, explicó.
A su vez, los manifestantes se mostraron preocupados porque se había corrido el rumor de que así como hubo despidos meses atrás y los casos nunca salieron a la luz, si algún docente apoyaba el reclamo de padres y chicos podría sufrir las consecuencias.
“En principio, vamos a estudiar las causas por las que se emitieron ambos despidos, después se realizará una inspección contable y administrativa en la escuela. Aquí hay muchas denuncias. A pesar de contar con un subsidio estatal del 80 por ciento, la cuota es altísima y sigue aumentando; los docentes cobran su salario en cuotas y se habla de otro tipo de irregularidades. La situación es compleja”, describió Gustavo Monduzzi, secretario gremial de Sadop, quien también mencionó que se comunicaron con Borsato y Santidrián para conocer la causa de los despidos y éstos expresaron que “por amor al Colegio no hablarán con la prensa por el momento”.
Firmes, ejemplares
Los alumnos de los niveles primario y secundario de Nuestra Señora del Huerto se mostraron preocupados por las consecuencias que podría traer la manifestación.
Algunos padres, a primera hora de la mañana de ayer, tuvieron la posibilidad de hablar con la madre superiora, María Delia Ruso, pero la charla no llegó a buen puerto. Según contaron, la religiosa manifestó que “desde el colegio no hay por qué dar explicaciones a los padres sobre las decisiones institucionales que se toman”, declaraciones que ofendieron a los padres.
Por otra parte, algunos docentes se acercaron al grupo de manifestantes y éstos, por temor a las represalias que puedan tomar los directivos sobre los educadores, les agradecieron con aplausos y gritos el apoyo, pero les pidieron que se vayan. “No nos vamos a arriesgar a que despidan a otro profesor”, dijeron algunos.
Y la plata, ¿dónde está?
En medio del reclamo por noticias de los despedidos, los alumnos se quejaron de tener que pagar 530 pesos mensuales, lo cual implicó que muchos padres con hijos en edad próxima al ingreso escolar decidieran inscribirlos en otro lugar, reduciendo así la matrícula general. “Además de pagar una fortuna, sabemos que el Colegio cuenta con apoyo del gobierno, y le paga a los docentes como quiere. Eso no es todo, no hay mejoras edilicias, tenemos cámaras de vigilancia fuera y dentro del colegio, las monjas nos sacan fotos en los recreos para vigilarnos, y ahora están vendiendo una rifa para poder recaudar fondos y pintar los patios. Es una cargada”, dijo, ofuscada, una de las alumnas de 4º año. La joven, junto a sus compañeros, también exigió información sobre su viaje a Champaquí, el cual deberían haber emprendido anoche.
“Tenemos un viaje pago. Desde la empresa aseguran que no nos devolverán la totalidad del dinero, estamos en medio de una tormenta en el colegio, y nos quedamos sin viaje y sin director. No sé adónde quieren llegar”, cuestionó.
Si este jueves no hay respuestas a los reclamos, los alumnos seguirán en la puerta del colegio, sin entrar.