Las altas tasas de interés complican la actividad industrial. Según un relevamiento de industriales de Rosario y la región, nucleados en la Unión Industrial Región Rosario (Unirr), en los principales bancos que operan en la plaza local se detectaron tasas máximas de descubierto en cuenta corriente del 100%, con créditos que en su mayoría supera el 70%, lo que consideraron “absolutamente atentatorio con el objetivo principal de las pymes que es generar trabajo”.
La ministra de Producción de Santa Fe, Alicia Ciciliani, dijo a El Ciudadano que “el sistema financiero no deja de drenar dinero desde el sector productivo hacia la especulación”. Para la funcionaria del gobierno de Miguel Lifschitz se trata de “el principal problema” que está atravesando la industria y las que más sufren son las que destinan su producción al mercado interno: “Las que exportan están bien”.
“Todo el sector productivo está haciendo malabares para competir con este nivel de tasas de interés, que son absolutamente incompatibles con la producción”, dijo la ministra. Y solicitó al gobierno nacional que baje dos puntos los encajes bancarios y con eso genere un sistema de financiamiento para las pymes.
La industria santafesina sufre una caída de cuatro meses consecutivos, con un saldo negativo de 1,6% hasta agosto, informó el Instituto de Investigaciones Económicas de la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe). La industria de materiales para la construcción, el procesamiento de la soja y la actividad metalúrgica son los rubros que más sufren la recesión.
Ante este panorama, el cierre es un fantasma que no deja de pasearse por las fábricas. En la provincia de Santa Fe hay unas 200 empresas en un procedimiento preventivo de crisis, que suman unos 15 mil trabajadores, y manifestaron dificultades para pagar los sueldos; según dijo Ciciliani.
Las pymes generan más del 80% del empleo en la Argentina y el financiamiento es fundamental para que sostengan su actividad. Según Unirr, la creación de empresas en la Argentina está muy por debajo de Chile y Brasil. Mientras que en el país trasandino se crea una empresa cada 125 habitantes, en la Argentina lo hace cada 2326. En Brasil, nace una empresa cada 342 habitantes.
En coincidencia con Ciciliani, los industriales rosarinos señalan a “la falta de crédito” como primera responsable de la situación. Pero también enumeraron la fuerte presión fiscal, la falta de mano de obra calificada, un hábitat empresarial pyme hostil y la alta litigiosidad.
Los industriales solicitaron una reunión a los responsables de las entidades financieras que operan en Rosario, para analizar alternativas que mejoren la situación más allá de las políticas macroeconómicas que se establecen a nivel nacional, la que, según dijeron en un comunicado, “privilegian los negocios meramente financieros en desmedro de la producción”.
Esquivando el crédito
Pese a que lo necesitan para sostener la producción, las empresas no toman crédito. “Con esta tasa, el financiamiento es cero”, dijo tajante Ciciliani. La ministra expresó que “tomar un préstamo es directamente quebrar, porque no hay actividad que genere una rentabilidad considerable para pagar esos créditos”.
“Las empresas, con toda la responsabilidad, tratan de evitar estas tasas de interés porque saben que se funden. Hay cero financiamiento y eso generó un corte en la cadena de pago que paralizó el sistema”, cerro la funcionaria socialista.
Mapa crediticio
El diputado provincial Joaquín Blanco presentó un proyecto en la Legislatura para crear una Comisión Investigadora de las prácticas de las entidades financieras santafesinas, ante las tasas de interés que consideró “usureras”.
En diálogo con El Ciudadano, el legislador socialista dijo que la idea es que “la Legislatura pueda verificar las prácticas de todas las entidades crediticias” y “echar luz ante prácticas de publicidad engañosa y situaciones de usura”.
Para eso propuso “crear un mapa de estas entidades con información sobre sus actuaciones y una recopilación de denuncias”.