Dos jóvenes fueron imputados ayer en los tribunales de San Lorenzo por el crimen de Mauro Pablo Emon, el policía de 38 años que fue asesinado este viernes en el ingreso a Capitán Bermúdez cuando intentó detener a tres hombres que cometían un robo. Según el fiscal Leandro Lucente, uno de ellos fue detenido minutos después en un asentamiento ubicado en las inmediaciones del lugar de crimen donde la Policía encontró una pistola y un revólver. El otro chico arrestado fue señalado por tres personas como el autor de un robo cometido en la misma franja horaria. Aunque aún la responsabilidad en el asesinato no fue probada, el secuestro de las armas y los testimonios bastaron para que los dos sospechosos quedasen detenidos bajo prisión preventiva hasta la audiencia preliminar al juicio bajo la imputación por robo calificado y homicidio.
Mauro Emon llevaba 12 años de trabajo en la fuerza y se desempeñaba en la Policía de Acción Táctica (PAT) de San Lorenzo. El viernes a la noche, en su día de franco, fue asesinado frente a su mujer y sus tres hijos cuando quiso auxiliar a un automovilista que estaba siendo asaltado por tres jóvenes.
El crimen
Alrededor de las 21, René K. estaba en calle Juan Manuel de Rosas de Capitán Bermúdez a bordo de su Fiat Palio blanco. Esperaba para girar y acceder a la ruta nacional 11, abarrotada de tráfico. Detrás, el bosque de la planta de Celulosa Argentina SA se extendía en la oscuridad. Desde allí salieron tres hombres con los rostros tapados y René escuchó la explosión de los vidrios laterales de su auto. Uno de ellos lo golpeó en la quijada, mientras otro tomaba sus pertenencias. Segundos después, el conductor escuchó un par de gritos y, luego, los tiros. Al salir del auto el trío ya no estaba y, a pocos metros de su coche, había un hombre tirado en el piso.
Se trataba del cabo Emon, quien viajaba con su familia hacia a Rosario a visitar a su mamá. Al ver el intento de robo frenó en la banquina, tomó el arma reglamentaria y le dio la voz de alto a los ladrones. Acto seguido, empezó el tiroteo y cayó herido. Si bien fue llevado rápidamente en una ambulancia al hospital Eva Perón de Granadero Baigorria, falleció poco después de ingresar.
En diálogo con El Ciudadano, el fiscal Lucente, a cargo de la investigación, sostuvo que una hora después dos jóvenes fueron detenidos en un asentamiento conocido como Los Espinillos, ubicado a metros del lugar donde se produjo el tiroteo. Mauricio G., de 20 años, fue encontrado escondido detrás de una garrafa. A metros de él, la Policía encontró un botinero que tenía guardada una pistola y, detrás de un paredón que separa la villa de la guardería Tifón, fue hallado un revólver calibre 22 en un desagüe a cielo abierto.
Presos
La detención del otro joven, identificado como Marcelo David D. de 19 años, se sostuvo en el testimonio de tres jóvenes que, según declararon, fueron víctimas de un robo poco antes de las 20 cuando esperaban el colectivo en una garita, en Richieri y ruta 11. De acuerdo con esta versión, fueron abordados por tres hombres armados que les robaron los bolsos que cargaban después de jugar al fútbol. Media hora después, las víctimas del asalto llamaron a la Policía y fueron a Los espinillos, donde reconocieron a Marcelo como uno de los ladrones. Según el fiscal, por las características físicas y la ropa que llevaba puesta y la franja horaria y geográfica en que ocurrieron los dos hechos, Marcelo podría ser uno de homicidas de Emon.
Testigos
A las pruebas contra Mauricio se suma un testimonio de un chico que dijo ver a tres hombres con bolsos parecidos a robados y uno de ellos se parecía al chico detenido después detrás de la garrafa.
A partir de estas primeras indagaciones, Lucente solicitó la prisión preventiva hasta la audiencia preliminar para los dos detenidos, que fue concedida ayer en los Tribunales de San Lorenzo. Los jóvenes fueron imputados bajo la calificación legal de robo calificado por el uso de arma de fuego en concurso real con el homicidio criminis causa, “cometido para asegurar el resultado del robo y procurar su impunidad”.