La pareja de la madre del bebé de 6 meses que murió en la tarde del domingo a causa de golpes que le propinaron en la cabeza fue imputada este martes por homicidio simple en calidad de autor. El juez Hernán Postma hizo lugar al pedido de la Fiscalía y dictó prisión preventiva para Franco L. por tiempo indeterminado. El magistrado tuvo en cuenta el informe médico donde se indicó que el bebé sufrió un traumatismo encéfalo craneal. También consideró las pruebas aportadas por la Fiscalía que dieron cuenta que la relación entre el acusado y la madre del niño era violenta. Postma solicitó además que se le realice un chequeo médico y psiquiátrico al imputado y un examen de ADN para determinar la posible paternidad biológica del bebé.
Los hechos
Según los testimonios que recolectó el Ministerio Público de la Acusación, la noche del sábado Aldana M., madre de Mateo A., de 6 meses, estaba acostada junto con su pareja, Franco L., y el bebé. Los tres reposaban en un colchón en el piso de la habitación trasera de la casa de la abuela de él. Aldana se levantó para darse un baño y dejó al menor durmiendo al cuidado de su pareja. Mientras se duchaba, en la parte delantera de la casa, empezó a escuchar gritos de llanto provenientes del fondo, que pronto se interrumpieron. Aldana se vistió rápidamente y al salir vio a su pareja con el bebé en brazos, quien trató de tranquilizarla. Según contó la mujer, al declarar en la comisaría, Franco no la dejó acercarse al bebé, a quien lo vio “blandito”. Alertados por los gritos, un grupo de vecinos se acercó a la vivienda. Franco se subió con el bebé a la moto de un vecino y se dirigieron al Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria. Aldana lo siguió en el auto de una amiga. Al llegar al hospital los médicos le diagnosticaron al menor traumatismo de cráneo grave y lo trasladaron al Hospital de Niños Víctor J. Vilela. A eso de las 15, Mateo murió producto de tres paros cardiorrespiratorios. La pareja quedó detenida. La madre recuperó la libertad el lunes y Franco L. quedó detenido en la comisaría 14ª.
Al declarar en la comisaría, Franco L. negó haberle pegado intencionalmente al bebé, pero dijo que podría haberse golpeado con el marco de la puerta en el intento de calmarlo. En la puerta de la comisaría Aldana, lo acusó a los gritos de haber matado al bebé.
Una historia violenta
Los fiscales Georgina Pairola y Adrián Spelta hicieron referencia a que Franco L. mantenía con su pareja una relación violenta. Según el relato de testigos y familiares de la pareja, Aldana conoció a Franco en 2015 en un boliche. Él se mostraba muy celoso con ella. Controlaba el tipo de vestimenta de la mujer y a menudo la insultaba. En enero del año siguiente, siempre según la Fiscalía, Franco amenazó con un cuchillo a Aldana y la golpeó. Al mes siguiente, Aldana se enteró de su embarazo. La pareja se separó durante varios meses y retomaron la relación cuando Mateo, el hijo de Aldana, ya había nacido.
Durante el primer tiempo, Aldana había mantenido una relación paralela con otro hombre, quien se hizo cargo de la paternidad de Mateo y le dio el apellido. Pero la mujer no sabe quién es el verdadero padre del bebé.
Según el Instituto Médico Legal, Aldana presentaba lesiones previas al momento del siniestro. También se constataron lesiones faciales en el menor que databan del viernes 14. Según los familiares de la mujer, ella explicó que fue víctima de un robo y que de ahí derivaron las lesiones. En relación con los moretones en el bebé, dijo que se lastimó jugando.
La defensa del acusado desmintió los cargos y negó que su defendido tuviera intenciones de lastimar al bebé. Ante el pedido de prisión de la Fiscalía, solicitó la libertad o la prisión domiciliaria.
El juez Hernán Postma tuvo en cuenta las pruebas presentadas por el Ministerio Público Fiscal y consideró que se trató de una muerte violenta, no natural. “Se produjo por traumatismo encéfalo craneal grave que se inició por un golpe”, señaló. Postma consideró que la responsabilidad del acusado que estuvo siempre presente en la escena de los hechos. También tuvo en cuenta las evidencias presentadas por el Ministerio Público Fiscal que indicaron que la relación de pareja era violenta. Así hizo lugar a la acusación e imputó a Franco L. de homicidio simple, con prisión preventiva dado el peligro de fuga o entorpecimiento probatorio. Además solicitó que se le haga un examen de salud y psiquiátrico, junto con un estudio de ADN para determinar la posible paternidad biológica del menor.
