“Lo que quiero es ayuda, necesito que me ayuden”, pidió casi en un ruego Leila, hermana de Maia, la chica que fue secuestrada, abusada, golpeada y quemada por su pareja. Su familia intentó protegerla y el agresor es quemó el coche y parte de la casa. Llego a amenazar a Leila con un arma y se presentó en el jardín de su hijo con una botella de nafta. Le dijo que iba a prender fuego al niño si no dejaba de denunciarlo. Maia se sentía culpable y escapó para volver con su captor por temor a lo que pudiera hacerle a su familia. El domingo lo detuvieron y este miércoles lo imputaron. La jueza Hebe Marcogliese dictó la prisión preventiva en su contra por el plazo de ley. A su vez ordenó una junta médica forense y una junta especial de salud mental para el acusado.
Héctor Omar F. tiene 45 años y un fuerte problema de adicción. La Fiscalía, a cargo de José Luis Caterina y Nora Marull, lo describió como un hombre sumamente violento. Si bien la historia de sometimiento tiene sus años, los hechos que le imputaron ocurrieron a partir del pasado 14 de mayo. Maia había vuelto a la casa de su madre, donde además están sus tres hijos. La chica tiene una situación de adicción que la ha llevado en varias oportunidades a una internación. La última vez Omar F. firmó para sacarla, por lo que no pudo continuar con el tratamiento.
El 14 de mayo obligó a Maia a ir a su casa, donde la amenazó con matar a sus hijos La retuvo y la sometió sexualmente. La golpeó con un cable y le produjo múltiples lesiones con un cigarrillo en la espalda, el brazo y la cara. Cerca de la 1 de la madrugada la sacó de la casa. En San Martín y Deán Funes comenzó a golpearla; la chica entró corriendo a un bar pidiendo auxilio y el agresor escapó. Maia fue asistida y derivada a la comisaría, donde no quiso radicar la denuncia.
Volvió a la casa de su madre, pero por la noche Héctor F. se presentó en el lugar y gritó: “Vengo a buscar a Maia. Voy a venir y los voy a prender fuego a todos”.
Arremetida contra la familia
La familia vive en un complejo habitacional que tiene un único ingreso; junto al portón Leila había dejado una camioneta que había comprado con su pareja hacia un mes. Según la Fiscalía, el agresor volvió a las 3 de la mañana, tiró sobre el asiento una goma espuma con un precursor que produjo fuego y generó un incendio que consumió el auto y el portón de la casa de la familia de Maia.
Leila contó que tuvo que romper el vidrio de la puerta para poder salir; la mitad de su casa quedó impregnada de humo y hollín. Sacó a su hijito de 2 años que sufre de problemas pulmonares y ahora su cuadro se agravó. “Quedamos 46 familias atrapadas en el fuego”, describió, para de inmediato añadir: «Tuvo que venir Litoral Gas a cambiar tres medidores de mis vecinos porque tenían pérdidas por el fuego. El daño es más allá de lo económico».
Al día siguiente el agresor volvió: “Maia, si estás ahí y no volvés para casa te voy a matar a vos y a tus hijos”. También amenazó a Claudia, la madre de la víctima, y se fue. Un día más tarde reapareció; esta vez se topó con Leila en la entrada del pasillo al complejo. La chica intentó hablar con Omar F., quien extrajo un arma y comenzó a disparar al aire, explicó Caterina.
«Intentaba hablarle. Me dice «¿Vos querés que te mate hija de puta?». Te juro que en ese momento lo único que hice fue correr, correr, correr», contó Leila. Maia lo denunció pero después se arrepintió: intentó «levantar» la denuncia. Otra de sus hermanas le preguntó por qué, y le contestó que tenía miedo. Con la seguidilla de hechos violentos, Maia se quebró. Durante la madrugada escapó de su casa y volvió con Omar F. El domingo una amiga de Leila la vio cerca del parque Urquiza y le avisó. Leila fue a buscarlos, los encontró y llamó al 911. El hombre fue detenido mientras estaba con la víctima.
La Fiscalía lo imputó por los delitos de rapto, abuso sexual con acceso carnal, lesiones agravadas por producirse en circunstancias de violencia de género, incendio y amenazas. Omar F. cuenta con cuatro condenas previas de delitos robo, resistencia, daño y desobediencia a una orden judicial; en uno de estos hechos Maia fue la víctima. Con todos estos antecedentes la fiscalía solicitó la prisión preventiva del imputado.
La declaración
Leila cumplió 25 años este miércoles. Con entereza decidió hacer uso de su derecho de víctima y contó el calvario que vive su familia. Tras pedir ayuda, contó que Omar F. se aprovecha de su hermana: “Ella misma lo ha dicho un montón de veces y los médicos lo saben. Le dice que si no está con ella nos va a matar a todos. Por eso primero nos amenazó, después prendió fuego”.
«Hice una prohibición de acercamiento y la violó en reiteradas ocaciones. Le hice la denuncia, lo meten preso, sale y así. No sé qué está esperando. Un día nos va a matar a todos o la va a matar a mi hermana», relató, y enseguida añadió que que Maia no se puede defender por sus propios medios: “No lo puede hacer porque tiene miedo, el mismo que tengo yo, que tienen mis hijos, mi mamá, mis hermanos”.
«Lo que quiero es ayuda, necesito que me ayuden. No tengo a dónde irme, estoy viviendo de una amiga porque no puedo estar en mi casa, está todo quemado, lleno de hollín y no sé qué hacer», dijo, y agregó: «Fue a la puerta del jardín de mi bebé con una botella con nafta a decir que si no lo dejaba de denunciar le iba a prender fuego al nene».
Finalmente la jueza Hebe Marcoglise ordenó la prisión preventiva del imputado por el plazo de ley, o sea 90 días. La defensa oficial estuvo a cargo de Marianela Di Ponte.