El juez federal de San Martín Juan Manuel Yalj admitió hoy que el testimonio que involucró al delegado de la línea Sarmiento Rubén «Pollo» Sobrero con la quema de vagones ocurrida en mayo pasado «se diluye un poco», aunque volvió a justificar su detención ya que -según sostuvo- cuenta con «fuertes elementos de prueba».
De todos modos, Yalj, que tiene que definir hoy si excarcela al delegado sindical de la línea Sarmiento, reconoció que «si el dictamen es favorable, sería liberado hoy».
En declaraciones formuladas a la prensa en la puerta de los tribunales federales de San Martín, el magistrado restó importancia a las amenazas de paro general emitidas por los trabajadores ferroviarios en caso de que no libere a Sobrero y admitió que esa situación «no preocupa».
Yalj aseguró que más allá del frágil testimonio del testigo Alan Skrobacki, «para llegar a dónde llegamos tenemos toda una serie de los distintos sabotajes que sufrió la línea y su concatenación con protestas gremiales».
«Lo que tenemos respecto de Sobrero, más allá del testimonio de Skrobacki, es todo el organigrama de sabotajes que sufrió el Sarmiento y que coinciden con las protestas gremiales. Tengo fuertes elementos de prueba», sostuvo.
La acusación contra Sobrero se basa en frágiles indicios aportados por Skrobacki, el indigente procesado que, arrepentido, dijo haber sido contactado por Leonardo Portorreal, un ex colaborador del delegado también detenido, para incendiar los vagones y que le pagaron por hacerlo.