Este lunes, autoridades de la Provincia y la Municipalidad se reunieron con representantes de los sectores gastronómicos y heladeros para discutir propuestas para minimizar los efectos negativos de las restricciones de circulación que se tomaron el viernes pasado por el agravamiento de la situación sanitaria. «No discutimos las medidas de restricción ni negamos la gravedad de la pandemia», señaló Carlos Mellano, representante de la Asociación Gastronómica y Hotelera de Rosario. Y agreg: «Sólo queremos buscar un equilibrio porque con la restricción horaria se nos complica la subsistencia», explicaron los gastronómicos. Otro grupo de unos 50 comerciantes gastronómicos que no está en la organización anunció que presentará un amparo en la Justicia.
En la reunión estuvieron presentes el ministro de Gobierno, Justicia, Derechos Humanos y Diversidad, Esteban Borgonovo; la ministra de Salud, Sonia Martorano; y el ministro de Trabajo, Roberto Sukerman. De la Municipalidad asistieron el secretario de Salud, Leonardo Caruana; el secretario de Desarrollo Económico y Empleo; Sebastián Chale, y el secretario de Gobierno, Gustavo Zignago.
Las autoridades ofrecieron un informe pormenorizado del impacto de la pandemia en los últimos días y explicaron que el agravamiento de la situación obligó a tomar medidas. El objetivo, por lo pronto, es que no impliquen un cambio de fase justamente para no perjudicar la actividad económica pero entienden que tuvieron un inevitable impacto sobre ciertas actividades comerciales, sobre todo por la restricción horaria.
«La idea de esta reunión es situarnos en la realidad y en función de eso analizar los pasos a seguir», señaló Borgonovo. Y agregó que están «abiertos al diálogo y a evaluar todas las propuestas» de los comerciantes, pero siempre teniendo en cuenta cómo avanza la situación de emergencia sanitaria.
La ministra de Salud ofreció un informe minucioso con base a cifras, estadísticas, gráficos y proyecciones y también a partir de su propia experiencia recorriendo hospitales. Martorano afirmó que actualmente el mayor problema es el crecimiento de la ocupación de camas. «Rosario tiene una ocupación del 81 por ciento en el sector público y del 72 por ciento en el privado», alertó.
El representante de la Asociación Gastronómica y Hotelera de Rosario –Aehgar–, Carlos Mellano, agradeció la oportunidad de poder plantear la situación y de trabajar en conjunto. «No discutimos las medidas de restricción ni negamos la gravedad de la pandemia», señaló. «Solo queremos buscar un equilibrio porque con la restricción horaria se nos complica la subsistencia», planteó el dirigente al tiempo que entregó una propuesta que será evaluada por las autoridades. También participaron de la reunión los dirigentes de Aehgar David Feigín y Martín Sosa.
El titular de la Cámara Industrial y Comercial del Helado Artesanal –Cicha–, Ciro Cacciabue, también señaló que su sector «no discute medidas sanitarias» pero pidieron ayuda del Estado para soportar una situación que se les está tornando muy difícil. «El sector tiene más de dos mil empleados y se nos complica el pago de sueldos, impuestos y servicios», señaló el dirigente, que participó acompañado del secretario de la institución, Juan Carlos Perrone.
Medida ante la Justicia
Por otro lado, unos 50 comerciantes que no están nucleados en estas instituciones anunciaron que presentarán un amparo ante la Justicia contra el horario de cierre de las 19.30 porque lo consideran «inconstitucional e irracional». «Nos vamos a defender hasta las últimas consecuencias», sostuvo en LT8 Reinaldo Bacigalupo, presidente de la Asociación Mercado Pichincha.
«Es un atropello a la libertad de ejercer el comercio directamente. No hay fundamentos. ¿Qué lógica tiene que puedas almorzar en un lugar pero no cenar?», planteó y cuestionó que hasta hace unos días la Municipalidad había defendido la permanencia de los locales gastronómicos como lugar de contención.
En este marco, un día después del anuncio de restricciones de circulación durante 14 días, bajo la consigna «Rosario quiere trabajar», referentes de varios rubros se concentraron el pasado sábado en la esquina de Oroño y Jujuy para expresar su descontento. La convocatoria a la protesta fue realizada por Gastronomía Unida, Cámara de Gimnasios, Canchas de Fútbol, Idear, Sindicatos, Comercios, Pymes, Proveedores, Hoteles, Salones de Fiestas y Centros de Eventos.
Bacigalupo habló del «sacrificio enorme» que hicieron por comprender el contexto sanitario: «No podemos creer este tipo de medidas tan violentas de un día para el otro. La verdad es que nos pareció una locura y no nos queda más que defendernos”.
Finalmente pidió que los funcionarios políticos «se acerquen a una realidad»: «Es muy fácil tomar estas medidas con la comodidad de un sueldo fijo bancado por todos los privados».
