Mientras el presidente Javier Milei intenta poner en práctica las ideas del fundamentalismo del mercado, uno de sus tíos es parte de los argentinos perjudicados por las medidas «libertarias» que quiere instalar a fuerza de delgación de facultades y decretos de necesidad y urgencia: tiene 63 años, se gana la vida con su bicileta, repartiendo diarios por la mañana y trabajando para una aplicación de pedidos por la tarde, y además lo están por desalojar del pequeño departamento que había comprado.
Es Juan José Milei, a quien todos conocen como Chicho, La historia del medio hermano de Norberto, el padre de Javier, salió a la luz gracias a una entrevista de la periodista Victoria De Masi publicada por elDiarioAr.
A falta de dos años para alcanzar la edad de jubilación, Chicho Milei trabaja gran parte del día en su bicicleta: por las mañanas reparte diarios y por las tardes pedalea para la reconocida app PedidosYa.
«Yo no tengo aportes de nada. Y hace ocho meses que no pago el monotributo», comentó el tío del Presidente. Y aclaró que votó al entonces candidato presidencial de Unión por la Patria, Sergio Massa, en el balotaje del pasado 19 de noviembre.
Mientras Norberto Milei pudo erigirse como empresario del transporte y ampliarse a otros rubros, Chicho «combinó el trabajo en la frutería del padre con otras ocupaciones», señala el reportaje: fue cadete en una fábrica de calderas, armó cajas en una fábrica de camisas, estudió para masajista deportivo y quiso incursionar como entrenador de pádel pero nunca tuvo alumnos. También lavó autos, fue sereno en un edificio y ayudó en la pizzería de un amigo.
Ahora, se encuentra apremiado por una orden de desalojo para abandonar el departamento de un ambiente y medio que tiene en el barrio porteño de San Cristóbal, que compró luego de vender el tres ambientes luminoso y con balcón terraza en Belgrano que heredó de los padres.
El vínculo entre Juan José y Norberto se cortó en 2005, cuando murió el padre de ambos y abuelo del actual jefe del Estado, Francisco Milei.
Chicho no intentó contactarse con el fundador de La Libertad Avanza, ni siquiera después de que asumiera como presidente. «Nah, ¿qué le voy a decir? Mis amigos me dicen «pero si ahora es el presidente, Chicho, escribile», pero… no, no. Yo espero que le vaya bien a él. Pero, no sé. No me interesa tanto», dijo ante la pregunta cantada.
Lo que sí hizo fue saludar a su sobrino con un mensaje en Facebook: «Felicitaciones, Javier, soy Juan José hijo de Chicho y Marcela fuerte abrazo PRESIDENTE», escribió en la red social.
