Luis Leal tendrá que recuperarse de una lesión muscular, una pérdida importante para Newell’s, aunque también una buena oportunidad para que Omar De Felippe pruebe alguna de las variantes de ataque que tenía en la cabeza a partir de un rendimiento opaco del delantero portugués.
Leal salió en el segundo tiempo del partido ante Lanús, tras sentir una molestia en el músculo. Hizo poco para que se lo extrañe. Incluso, De Felippe no le dio importancia al tema en conferencia de prensa y cuando se le preguntó si estaba lesionado respondió: “Me pidió salir y lo cambié”.
A De Felippe no le gustaba como estaba jugando Leal. El día del empate ante Belgrano, cuando Leal erró tres chances claras de gol, el técnico deslizó que si no levantaba el nivel podía reemplazarlo. Y ahí mismo pasó lista de los candidatos a ocupar ese lugar: Lisandro Cabrera y Alfio Oviedo.
Con Leal al menos dos partidos afuera por la lesión (tal vez falte alguno más), De Felippe debe decidir quién es el indicado para ocupar el puesto de nueve, y el sábado ante Estudiantes ya tiene al elegido: Lisandro Cabrera.
De Felippe elogia al juvenil Cabrera cada vez que puede, y por eso lo llevó al banco en los últimos cuatro partidos, dejando fuera de los concentrados a Alfio Oviedo, el delantero que llegó como refuerzo de jerarquía en la pretemporada.
Cabrera fue además el atacante titular en varios partidos de pretemporada, cuando Leal se lesionó, e incluso anotó un gol por Copa Santa Fe ante Unión.
En las tres primeras fechas de Superliga, Cabrera jugó en reserva, y anotó tres goles, lo que lo volvió a poner en el radar de De Felippe. De ahí en más fue al banco ante Atlético Tucumán (por torneo local y Copa Argentina), Belgrano y Lanús y siempre ingresó, aunque no pudo anotar. Y ahora tendrá su chance desde el arranque.
Cabrera es un nueve alto, más de área que Leal, aunque no es tan corpulento, lo que lo hace más veloz, pero menos propenso al roce con los defensores. Y en los partidos que le tocó ingresar, se mostró algo ansioso.
El otro que espera su chance es Alfio Oviedo. El delantero paraguayo generó gran expectativa con su llegada. El vice D’Amico negoció en Asunción varios días y lo trajo tras arreglar un préstamo de 150 mil dólares y una opción de compra superior a los tres millones.
Oviedo era el único de los refuerzos que llegaba con pretemporada encima, pero De Felippe lo vio lento y además entendió que le estaba costando la adaptación al fútbol argentino, dentro y fuera de la cancha. “Es un chico joven (22 años), que llegó a un fútbol difícil. Se está poniendo mejor, pero no queremos mandarlo a la cancha si no está bien, porque después no rinde y la gente lo va a cuestionar”, aclaró el entrenador.
No faltó la polémica por la ausencia de Oviedo en cuatro partidos. Las razones de De Felippe no convencían a nadie. Y luego se supo que el atacante se negó a jugar en reserva ante los tucumanos. El castigo que le impuso De Felippe fue no concentrarlo cuatro partidos, aunque el entrenador aseguró que no era un castigo.
Sin importar si fue penitencia o puesta a punto, el tiempo de Oviedo fuera de los concentrados terminó, el sábado estará entre los relevos.
¿Hay alguna otra alternativa? Los otros delanteros de área son Francisco Fidryszewski, Alexis Rodríguez y Zé Turbo, aunque ninguno de los tres aparece con chances este fin de semana.
Fidryszewski empieza a ser el elegido de los hinchas, al menos así lo revela la encuesta que realizó El Hincha, donde el 44 por ciento considera que debe jugar por Leal.
Pero el sábado jugó recién su segundo partido de reserva del año tras una ruptura ligamentaria en la rodilla, y De Felippe no quiere apurar su regreso.
El delantero fue goleador de Argentinos Juniors en su ascenso a primera y el año pasado fue a préstamo a Lugo porque Llop no lo tenía en sus planes. Pero al regreso, aun recuperándose de una compleja lesión, De Felippe le pidió que se quedara. Y lo tendrá en cuenta en el corto plazo, mucho más después del golazo que anotó en sábado en el partido preliminar.
Alexis Rodríguez, que el torneo pasado tuvo varios partidos como titular, hoy está más relegado. Jugó algún partido en reserva (anotó ante Belgrano) y el resto lo vio desde la platea.
Por último aparece Junior Correia. A De Felippe no le gusta que le digan Zé Turbo, pero lo que es peor tampoco lo entusiasma demasiado su forma física y futbolística. Por ahora sin chances.
Newell’s logró la primera victoria en Superliga ante Lanús y anotó tras dos partidos sin gritos. Ahora perdió el nueve, un nueve sin goles. Se abrió un hueco y Cabrera, Oviedo o Fidryszewski quieren ocuparlo. Decide De Felippe.
