La producción de biogás podría reemplazar las importaciones de gas natural licuado de la Argentina ya que con 700 mil hectáreas de sorgo y maíz se podrían producir 6 mil millones de metros cúbicos (m3) anuales.
“En los últimos años nuestro país incrementó sus importaciones de combustibles para cubrir las demandas eléctricas, industriales, residenciales y de transporte”, recordó en un comunicado la Asociación de Maíz y Sorgo de Argentina –Maizar–, que impulsa la iniciativa.
Las importaciones de gas natural licuado que ingresan por las ciudades bonaerenses de Bahía Blanca y Escobar suman unos 6.000 millones de metros cúbicos anuales y obligan a una importante salida de divisas para el país.
Para su sustitución harían falta unas 700 mil hectáreas de sorgo y maíz que se podrían combinar con una importante cantidad de residuos orgánicos.
“Gracias a sus excelentes condiciones agro-ecológicas,la Argentinaes uno de los pocos países donde se podría producir biogás a partir de silaje de maíz o sorgo a un precio competitivo”, explicó Maizar.
“Se podría transportar a través de nuestras redes de gas natural desde las zonas productoras hacia los centros de consumo para sustituir parte del uso del gas natural”, aseguró.
El biogás puede usarse en las turbinas de gas para producir electricidad o como combustible para el transporte, después de un proceso de purificación.
Además sirve para producir electricidad y calor en plantas combinadas.
“El concepto de cadena de valor, que es la base del pensamiento de Maizar, nos permite comprender la relación entre oferta y demanda energética desde un nuevo ángulo”, agregó en su comunicado la entidad que dirige Santiago González del Solar.
Este “nuevo ángulo” o punto de vista refiere a problemas empresarios y económicos vinculados con el abastecimiento energético, ambientales en relación al tratamiento de los residuos, y sociales con respecto al empleo, el ingreso y la demanda de alimentos y energía, según la entidad.
Así lo propuso Maizar en el documento “Desafíos y Oportunidades para las Cadenas del Maíz y el Sorgo”, en 2008.
El espejo de Alemania
El biogás es una fuente de energía competitiva en costo. Se genera a partir de cultivos agrícolas, como el maíz y el sorgo, combinados con deyecciones de aves, bovinos, porcinos, residuos industriales orgánicos, residuos sólidos urbanos o aguas cloacales y otros desechos.
Esta capacidad de obtener energía a partir de residuos le da a la industria del biogás un rol central en el cuidado del ambiente.
Alemania es un país pionero que alienta la producción de biogás desde la década del ’80.
Hoy cuenta con una capacidad instalada de 6 mil plantas de generación de biogás, que consumen principalmente silaje de maíz y que brindan energía a 3,3 millones de hogares, además de tratar 15 millones de toneladas de residuos que se utilizan para generar energía.
Para esto utilizan alrededor de 600 mil hectáreas de cultivos, en especial maíz.