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“Quiero justicia y que queden presos, que no quede impune”

Rubén Romero, padre de la menor asesinada cuyo cuerpo se encontró ayer detrás de un predio de Ceamse, afirmó que además de los cuatro detenidos podría haber “más personas metidas” en el crimen.

Rubén Romero, padre de la adolescente asesinada Melina Romero, afirmó hoy que si los cuatro detenidos por el crimen «están presos, son los culpables», pero advirtió que podría haber «muchas más personas metidas en el tema».

El hombre, ex policía, admitió en declaraciones a la prensa que él «no conocía a ninguno» de los cuatro detenidos -dos menores y dos adultos- por el caso, a la vez que reclamó: «Quiero Justicia y que queden presos, que (el asesinato) no quede impune».

«Que la Justicia actúe, que siga trabajando y los meta presos, que se termine toda esta porquería de andar vendiendo drogas y alcohol», pidió el papá de la adolescente de 17 años, cuyo cadáver fue hallado ayer detrás de un predio de la Ceamse, en José León Suárez, a un mes de su desaparición.

Para Romero, «en esta forma de homicidios siempre hay muchas mas personas metidas en el tema, no son solamente tres, cuatro o cinco gatos locos» y abundó que «hay mas metidos, hay muchos casos igual».

Consultado por la chica denominada «testigo clave», opinó que «se acordó muy tarde» de dar su relato de los hechos y reconoció que «era amiga» de su hija y de la familia, «porque incluso estuvo en la casa» de Ciudad Jardín, partido de Tres de Febrero, adonde vivía la víctima con su madre.

Además, Romero aconsejó a los padres de adolescentes que «hablen con ellos y no los descuiden» porque luego «esto es lo que pasa y ahora estamos lamentando la pérdida» de Melina.

El cadáver de la chica de 17 años que estaba desaparecida hace exactamente un mes fue encontrado ayer dentro de una bolsa en un terreno de José León Suárez, ubicado detrás del depósito de residuos de la Ceamse y que es cruzado por las aguas del río Reconquista.

Melina había sido vista por última vez en la madrugada del domingo 24 de agosto tras salir de la discoteca Chankanab, de San Martín, junto a un grupo de jóvenes. Los investigadores presumen que pasó primero a una casa de Villa Escalada y luego hasta otra vivienda -donde funcionaba un templo umbanda-, donde habría tenido lugar una fiesta de sexo, drogas y alcohol.

Cuando la menor se quiso ir «le aplicaron golpes, la abusaron y la volvieron a golpear. La colocaron en posición fetal y la metieron en una bolsa», aseguró el abogado Marcelo Biondi, representante de la familia de la víctima.

Luego habrían puesto piedras en la bolsa donde colocaron el cadáver y la tiraron al río Reconquista, que desde su nacimiento hasta su desembocadura pasa por 13 partidos, entre Marcos Paz y San Fernando. Por el caso hay cuatro detenidos, otro imputado y dos prófugos.

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