Como cada año, y tratando de poner en perspectiva una pandemia que el año pasado impidió su realización, este viernes se vuelve a poner en marcha el Festival de Teatro de Rafaela (FTR21), en su 16ª edición, con una programación que se distribuirá entre este fin de semana y el próximo, es decir que se extenderá desde este 29 de octubre hasta el domingo 7 de noviembre, con algunas particularidades y unos meses corrido de la agenda, dado que su fecha histórica y habitual es a mediados de julio, en plenas vacaciones de invierno.
De cara a un festival que llegó a programar treinta espectáculos, incluso con algunos internacionales, el FTR llega a esta edición con una veintena de propuestas, seis de ellas rafaelinas, con un total de 54 funciones, en lo que se presume como un año bisagra de cara al regreso de una supuesta “normalidad” parecida a la anterior que habilite los encuentros sin restricciones para el 2022, pero teniendo en claro que ya hay un público potenciado por lo cual se deberá ir ahora con esa misma impronta a potenciar la producción teatral de Rafaela, una ciudad con una enorme tradición teatral, grandes directores y grupos que han marcado su recorrido histórico y que por unos días transforman a esa bella y pujante urbe de algo más de 100 mil habitantes en una gran escenario a escala urbana.
El FTR se realiza desde 2005 por iniciativa del municipio local, un tiempo en el que no paró de crecer, expandirse y multiplicar sus posibilidades, y en los últimos años, su actual director artístico, el actor, director, docente y gestor cultural Gustavo Mondino, potenció esas posibilidades para continuar consolidando a esa ciudad del noroeste santafesino como un polo cultural de referencia regional y nacional, algo que consiguió apelando a la diversidad de las poéticas involucradas en las obras de su siempre cuidada y elogiada programación, sus espacios de formación, pero particularmente sus instancias de pensamiento y debate que en gran medida le permitieron abrirse a la escucha, no parar de crecer, y formar nuevos públicos, uno de los logros más tangibles y valiosos del FTR.
De este modo, en la tardecita de este viernes, con actividades y funciones, comienza el FTR21. Desde las 20, por el ya icónico bulevar Santa Fe, se conocerá Caminata lumínica, una intervención con carácter de instalación de puesta de luces pensada para la apertura. Y en ese mismo horario, en el imponente Escenario Móvil del Predio Roque Sáenz Peña tendrá lugar la función de apertura con el imperdible El Danzón, espectáculo musical-teatral de la compañía Los Amados.
Previamente, a las 19.30, en el Anfiteatro, se presentará Las Vengadoras, comedia de Bernardo Cappa, y un poco más entrada la noche será el turno de Destino insular, producción del Centro Ciudad de Rafaela que se verá en el Teatro Lasserre, para cerrar la jornada de apertura en La Máscara con La Elegida.
Repensar lo pensado
“Es importante pensar que empezamos a transitar, y ojalá así sea, un tiempo de post pandemia, pero el deseo de todos es estar mejor e intentar recuperar la vieja normalidad”, dijo en diálogo con El Ciudadano el director del FTR, Gustavo Mondino, que este año tomó la sabia decisión de sacar el festival, mayoritariamente, a la calle y a los espacios abiertos.
Y sumó: “El festival nos toca en este momento donde está todo más descongestionado, pero lo cierto es que cuando empezamos a planearlo no teníamos esta certeza, por lo tanto empezamos a pensar y a armar una edición del festival que sabíamos que en cualquier momento quizás debíamos volver atrás por las idas y vueltas que tuvo la pandemia. Y también que el festival debía tomar un rumbo de lo que en ese momento se vislumbraba como posible. Tras la suspensión del año pasado, fui de a poco viendo la evolución de los otros festivales del país, Latinoamérica y el resto del mundo, donde algunos optaron por la virtualidad y otros por opciones mixtas entre lo presencial y lo virtual. De todos modos, teníamos claro que una edición virtual no sería convocante para Rafaela y decidimos seguir esperando hasta ahora”.
Mondino, que entiende y conoce los gustos de un público al que vio crecer en todos estos años y en los previos como integrante de los grupo Punto T y La Máscara, aportó: “La idea que tengo en el verano es proponerle al municipio un festival con mucha presencia al aire libre, y en este caso pospusimos la fecha habitual de julio para esta semana, donde el clima empieza a ser más ameno por las noches, entonces vamos a poder disfrutar al aire libre de las tardecitas y las noches de estos días de festival; sobre esa idea empezamos a programar. Por eso nos quedamos sólo con dos salas que son las más tradicionales: Laserre y La Máscara como espacios cerrados y con aforos, y lugares al aire libre, espacios grandes donde podamos sumar más cantidad de público. Y más allá de que en este tiempo se flexibilizaron algunas cosas, nuestro objetivo es seguir siendo cuidadosos y tratar de que la gente también lo sea para que podamos todos disfrutar del festival”.
Programar, esa es la cuestión
En la presente programación se destacan, además de las referidas de la apertura, otras propuestas como Ana y Wiwi de Lorena Romanin, La Elegida de Laura Nevole y Paula Fanelli, La casa de las palomas de Victoria Hladilo, Qué hermosa kermesse del grupo Ciertas Petunias, Kinematos de Ana Clara Manera y Martín Umerez, ¡Bailemos… que se acaba el mundo! Una audio-obra interactiva para bailar con el público de BiNeural Monokultur, Carne de consumo personal de Jorge Thefs, Un domingo de Proyecto Migra, Perdón de Sutottos por el dúo homónimo, Sueño de Emiliano Dionisi y Compañía Criolla, Que todas las vaquitas de Argentina griten mu por Grupo Mínimo y La medicina de Molière por los rosarinos de la Academia del Humor.
Además, entre otros espacios por fuera de la programación como son las Rondas de Devoluciones de cada mañana coordinadas por Luisina Valenti y con la participación de periodistas especializados de distintos medios del país, un clásico del FTR que se ha sostenido a lo largo de los años y que público y artistas agradecen, este año tiene en la programación un espacio destacado la producción teatral rafaelina surgida de distintos laboratorios de creación escénica, con títulos como Noches blancas, Tierra de nadie, Frutos del bosque, Los Encuentros y la elogiada y ya estrenada Nombrarte recuerdo.
Respecto de esta selección de obras, que también se vio atravesada por el contexto pandémico, Mondino se explayó: “Este no es un festival que tenga una línea curatorial con alguna temática específica; por el contrario, tratamos de llegar a la mayor parte de las y los potenciales espectadores rafaelinos posibles y a la gente que se acerca de otros lugares también, teniendo como premisa la calidad y diversidad de las obras que lleguen de diferentes partes del país, pero también teniendo en cuenta a un sector de público que siempre va por más, que busca lo nuevo, gente a la que le interesan temáticas que los movilicen y al mismo tiempo, esa programación que es para toda la familia. La diversidad es una marca de este festival y entonces, cuando recibimos las obras desde la convocatoria, pensamos en elegir a partir de que sean propuestas muy diferentes entre sí, que contemplen diferentes géneros, pensando siempre en ese diálogo ya entablado entre temáticas y público”.
Y en el mismo sentido, puntualizó: “Este año está la particularidad de potenciar el aire libre en diferentes espacios; eso nos llevó a modificar algunas de las lógicas de pensamiento que ya veníamos transitando. Y al mismo tiempo, con otra mirada respecto de ese teatro con elencos pequeños que rotaba por las distintas plazas de la ciudad, dado que ahora son elencos más números y propuestas más grandes; el teatro al aire libre exige una línea de pensamiento aparte, donde se ponen en cuestión una serie de variables de producción, como por ejemplo cuál es el plan B en caso de mal tiempo”.
Finalmente, Mondino destacó la importancia de la producción rafaelina en la presente programación: “Es muy importante esta nueva línea que pudimos desarrollar en relación con lo local, pensada desde los Laboratorios de Creación Escénica. Son cincuenta artistas rafaelinos que están siendo dirigidos por cinco directores y directoras, Jorge Eiro, María y Paula Marull, Emanuel Calderón y Emiliano Dionisi; ellos trabajaron con diferentes equipos y van a estrenar una serie de piezas dentro del festival. Fue un proceso de tres meses de trabajo previo, presencial y virtual. Y esta iniciativa tiene por objetivo potenciar la producción con directores invitados, en este caso con producciones que fueron pensadas para ser montadas al aire libre, dado que tenemos muchos artistas pero pocos directores y directoras; esta es una manera de estimular la producción rafaelina con el apoyo de grandes profesionales a nivel nacional”.
Para agendar
La programación completa del FTR21, que se extenderá desde este viernes hasta el domingo 7 de noviembre, se puede consultar, extendida o detallada, a través de www.rafaela.gob.ar/festivaldeteatro/Programacion.aspx. En el mismo portal se encuentran disponibles las entradas.