Omar Palma se decidió por ubicar dentro del equipo titular a Ramiro Costa para reemplazar a Matías Ballini. Si bien el entrenador contaba con distintas opciones para cubrir la vacante que deja el suspendido Matías Ballini, tales los casos de Ramiro Costa, Martín Rivero y Roberto Guizasola, optó por Costa. De esta manera, el juvenil se ubicó como volante por la izquierda y Carrizo pasó de enganche.
El que quedó fuera de esta puja, por cuestiones tácticas, es Germán Rivarola. Es que Palma entiende que Pirulo debe jugar como doble cinco. Y para recibir a los tucumanos, la idea es la de poner en cancha un esquema más ambicioso, seguramente con un enganche definido (Carrizo).
Entre los candidatos a estar desde el minuto inicial el sábado, en la previa al entrenamiento de ayer el juvenil Costa estaba por delante de Guizasola y Rivero. Y la idea que finalmente llevó a cabo el entrenador se sustentó, principalmente, en lo sucedido el sábado pasado en Córdoba. En esa ocasión, a 25 minutos del final, cuando Palma tenía a los tres entre los suplentes, optó por Costa para sustituir a Méndez.
Hasta el momento, en los seis encuentros del ciclo Palma, Costa sólo estuvo en cancha esos minutos frente a Instituto. Pero sus competidores jugaron mucho menos.
Rivero, por ejemplo, sumó 8 minutos, ingresando en el final de los partidos ante Chacarita (NdR: entró por Carrizo a 5 del final), y frente a Independiente Rivadavia (NdR: jugó 3 minutos en lugar de Méndez).
Guizasola, por su parte, apenas estuvo 3 minutos en cancha. Fue el último sábado en Córdoba, cuando ingresó por Carrizo.