El juez federal de Dolores Alejo Ramos Padilla habló por primera vez de la causa en la que investiga posible espionaje ilegal y extorsiones, en las que está implicado el rebelde fiscal Carlos Stornelli. “Por más que me quieran vincular con un sector o con otro, me tengo que atener a las pruebas, y pocas veces he encontrado tanta prueba como en este expediente”, aseguró el magistrado en diálogo con el canal TN en las puerta de su juzgado. Mencionó, en el diálogo, las actividades en la provincia de Santa Fe que, se sospecha, pudieron tener el objetivo de enlodar al gobierno del Frente Progresista.
Ramos Padilla es blanco de una andanada de cuestionamientos por parte del oficialismo nacional –lo que incluye al presidente Mauricio Macri– bajo la acusación de llevar adelante el caso destapado por el espía y falso abogado Marcelo D’Alessio para entorpecer la llamada «causa de los cuadernos» o de las fotocopias, que comanda Stornelli.
“Esta causa poco tiene que ver con la causa de los cuadernos, como así no tiene que ver con la causa de Los Monos. Lo que sí tiene que ver es con las actividades de espionaje que se pueden desarrollar a la sombra de esos expedientes. Estamos investigando el espionaje político en Corrientes, donde el afectado fue el ex gobernador (Ricardo) Colombi. Estamos investigando actividades de espionaje en Rosario, donde se pueden haber realizado maniobras para afectar al gobernador de Santa Fe (Miguel Lifschitz), maniobras de lavado de dinero de centenares de millones de dólares. Hay un caso puntual que atrae a la opinión pública, que es el fiscal de Capital Federal, pero no es el eje de la investigación”, explicó el magistrado de Dolores.
“Puede ser que dentro de una causa, esta banda, donde hay 15 imputados, actúe en algún caso a la sombra de algún expediente y a partir de eso pueda llevar adelante una extorsión. De ninguna manera soy el juez de los jueces ni tengo posibilidad de afectar esas investigaciones. Esta investigación no afecta aquellas. Lo que pasa que estamos investigando una red de espionaje que se ha valido de todo. Estamos analizando la situación del poder judicial, de lo periodistas”, agregó.
Durante la entrevista, Ramos Padilla fue consultado repetidas veces de la supuesta operación de ex funcionarios kirchneristas detenidos para afectar a Stornelli y que habría salido a la luz a partir de escuchas telefónicas divulgadas de nuevo, este domingo, por los comunicadores Luis Majul y Jorge Lanata. El propio Stornelli impulsa esa denuncia para evitar declarar como imputado en esta causa, donde ya fue citado por quinta vez a indagatoria.
“Si hubiera habido algún acuerdo, por ahora les habría ido muy mal, porque no hubo ninguna clase de avance en las investigaciones”, respondió Padilla y detalló: “A mí no me compete si conocían o no el contenido de la denuncia. Si lo conocían, allá ellos. Acá hizo la denuncia el señor (Pedro) Etchebes –el empresario que inició la causa con su denuncia–, que dijo que era víctima de un delito de extorsión y que los imputados eran D’Alessio, Stornelli y (el juez Claudio) Bonadio, que le reclamaban 300 mil dólares. El juzgado, si lee la resolución del 25 de febrero, descarta de plano que alguno de los funcionarios estuviera involucrado en el reclamo de dinero”.
Etchebes no es el único caso: hay 30 más
En ese sentido, señaló que si se eliminara el caso Etchebes del expediente, aún quedarían otras 30 operaciones de inteligencia.
“Acá se presentó el 28 de enero una denuncia muy grave, que era una extorsión en curso. Frente a esto, donde hay riesgo para la vida y exigencia de dinero, tenía que actuar. Intervine los teléfonos. Descubrimos otras operaciones que llevaba adelante el señor D’Alessio, como plantar drogas, contactos con el servicio penitenciario y, a partir del 6 de febrero, que se hace el allanamiento, el objeto procesal de la causa varía sustancialmente porque encontramos armas de altísimo nivel, cámaras espías, drones, documentos de inteligencia con sello de la embajada de Estados Unidos e Israel”, recordó la compleja trama que salió a la luz y sobre la que trabaja para obtener las pruebas.