El entrenador del Inter, Claudio Ranieri, criticó al delantero Mauro Zárate y manifestó que lo hace desesperar por su juego. También, elogió a Javier Zanetti y Esteban Cambiasso.
Desde hace tiempo, Zárate, llegado esta temporada al Inter procedente de Lazio, no ocupa un lugar entre los titulares del equipo.
«Maurito es un muchacho de oro, tiene todo para ser un gran jugador pero me hace desesperar por su juego”, expresó el entrenador. Y luego continuó: «A veces pienso en los partidos que es el momento de mandarlo al campo de juego, pero él no toca el balón. No persigue a los rivales, es un espectador. Luego en los entrenamientos juega unos partidazos y es un fenómeno».
Ranieri le contó al diario Corriere Della Sera que le enoja mucho que no juegue de la misma manera en los partidos que en los entrenamientos y que siente que es culpa suya porque no puede encontrar la llave justa para hacer jugar bien a Zárate.
Por otra parte, el entrenador, en vísperas del clásico ante el Milan que se disputará este domingo, el técnico elogió al capitán del equipo Javier Zanetti, de quien dijo: «Es un ejemplo; en los entrenamientos es el primero en llegar y el último en irse; su empuje es muy importante».
Ranieri también resaltó la labor del mediocampista Cambiasso de quien apuntó: «Es el entrenador dentro del campo, conduce y orienta a sus compañeros».
Con relación al delantero Diego Milito, quien parece haber recuperado el olfato de gol tras dos tantos obtenidos ante el Parma (5-0), Ranieri consideró: «Es un jugador que siempre ha realizado el desempeño de los verdaderos atacantes; tiene mucho que dar y yo esperaba su recuperación».
Finalmente, sobre Ricardo Álvarez, el técnico opinó: «Es todavía muy joven; está muy habituado a un fútbol distinto y ha sufrido la preparación al inicio y ahora comenzó a entender cuál es su papel dentro del equipo».