La Justicia de Rosario ratifcó la absolución de los cuatro imputados por el crimen de Walter Cáceres, el joven de 14 años asesinado en feberero de 2010 en un tiroteo ocurrido luego de un encuentro entre Newell’s y Huracán.
De este modo, la Cámara de Apelaciones en lo Penal dictó el fallo que beneficiará a los imputados Carlos Fleitas, Claudio Ariel Cantero, César Raúl Marchetti y Mariano Salomón.
La fiscal que intervino en el juicio, Ana Rabin, había solicitado la pena de 18 años de prisión para los tres acusados principales y para el cuarto imputado, Mariano Salomón, había pedido una condena de 12 años por considerarlo actor secundario.
El tribunal oral integrado por los jueces José Luis Mascali (presidente), Edgardo Fertitta y Julio César García consideró que no se podía probar la participación de los acusados en el ataque del micro y por esta razón quedaron en libertad.
El fallo dispone «no hacer lugar a la declaración de inconstitucionalidad del artículo 478 del Código Procesal Penal de Transición y admitir el recurso de apelación según los fundamentos expuestos por la mayoría».
Además, impone «al Dr. Carlos Varela la sanción de apercibimiento por el trato inadmisible ofensivo que le brindó a la Sr.a Fiscal de Cámara (Cristina Rubiolo)», a quien el abogado había comparado con Goebbels (el ministro de propaganda de la Alemania nacionalsocialista de Hitler).
El hecho
Walter Cáceres era uno de los hinchas que en la madrugada 4 de febrero de 2010 volvía en colectivo luego de presenciar el partido que Newell’s Old Boys había disputado la noche anterior contra Huracán, en Parque Patricios.
Dos micros alquilados venían en caravana por la autopista Aramburu, pero en el peaje de General Lagos uno de los rodados se demoró, mientras que el otro siguió avanzando.
Al llegar a la altura de barrio Las Flores, la pinchadura de un neumático hizo que el colectivo que iba adelante, en el que se suponía que viajaba el Panadero Diego Ochoa, estacionara al costado de la calzada.
En ese momento, los pasajeros del micro habían sido emboscados por un grupo de personas que disparaba desde el costado de la ruta.
Como consecuencia de los disparos, tres personas resultaron heridas: Walter Cáceres fue alcanzado por tres proyectiles en la cabeza y otro en la espalda y falleció 36 horas después en el Heca. Otros dos hombres, Diego Malcovic y Carlos Muratovic, terminaron con heridas de escasa consideración. Malcovic fue asesinado un año después cerca de un boliche ubicado en Alvear y Salta.
