En el marco del 32° Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, este domingo se presentó Columbus, una película protagonizada por John Cho y Haley Lu Richardson del realizador coreano Kogonada. En el film, una combinación armoniosa entre la narración cerebral y la emocional, el director parte de la arquitectura de una ciudad para, desde allí, abordar cómo se experimenta el espacio y la ausencia. El público colmó la sala y ovacionó el film tras la proyección.
“La arquitectura es un tema clave en esta película, básicamente, en el sentido del vacío, no sólo en la construcción del espacio, sino también en la capacidad de encontrar sentido en el vacío de las propias vidas y de las relaciones personales”, expresó el crítico y ensayista visual de origen surcoreano en el marco de una conferencia realizada luego de la proyección en el Teatro Auditorium. Y sobre esta, su opera prima, el director, resumió: “Es un drama universal que intenta mostrar que la tradición de la cultura asiática tiene una profunda obligación hacia los padres”.
Por otra parte, la película transita las relaciones entre el tiempo y el espacio. “Es la relación entre el espacio exterior y el espacio interior, la manera en que estos dos se relacionan, y cómo lo exterior puede influenciarnos, no solamente en términos espaciales, sino como seres humanos. Este encuentro en el espacio que nos da forma a nosotros mismos y nos hace reflexionar sobre nuestra propia existencia.”, reflexionó el director.
Columbus integra la Competencia Internacional, integrada por trece películas que se proyectarán durante los diez días del Festival y serán evaluadas por Érica Rivas, Edouard Waintrop, Amadeo Pagani y Boyd van Hoeij y Catalina Sandino Moreno.