El ex ministro de Hacienda y responsable del préstamo multimillonario que otorgó el FMI a la Argentina en 2018, Nicolás Dujovne, avaló la negociación acordada recientemente entre el gobierno argentino y el organismo multilateral y consideró: “No me arrepiento de haber ido al Fondo, los problemas de la Argentina son muy grandes, el FMI nos estaba ayudando a resolverlos en un costo menor”.
Respecto al acuerdo, deslizó: “Es un primer paso preliminar, no puedo no calificarlo como positivo. Nadie discute en el mundo que hay que tener el fisco en orden y remover el financiamiento monetario del BCRA. La economía argentina está plagada de problemas: tenemos mucha pobreza, mucha inflación, cepos. Si agregábamos un default íbamos a estar mucho peor”.
En diálogo con Radio Rivadavia, Dujovne afirmó que dos de los problemas más graves que enfrenta el país son los «defaults permanentes» y recaer en los «controles de cambio».
Ante la consulta sobre qué destino tuvieron los dólares que llegaron al país (el acuerdo stand-by fijaba un préstamo por u$s57.000 pero finalmente fueron enviados u$s44.000), explicó: “Los dólares no se evaporaron, los usamos para estar al corriente de la deuda mientras mejorábamos la posición fiscal. Llegamos al equilibrio en el día que nos íbamos e íbamos a tener superávit en los años siguientes». Para el ex ministro, el objetivo era «reemplazar financiamiento del Fondo por financiamiento del mercado”.
En referencia al informe del FMI de diciembre pasado, en el que la entidad reconoció que el plan de Cambiemos “fracasó”, el economista sumó: “En el trabajo que realiza el Fondo parte de la crítica es que se debería haber ido mas rápido en el programa fiscal con reformas estructurales”, y de hecho interpretó que hubo también una mención a los argentinos. “Hay una crítica a la sociedad argentina que no acompañó la continuidad de un programa que nos estaba ayudando a resolver problemas estructurales”, entendió.
Respecto a la autocrítica que hacía como parte de la coalición gobernante en ese entonces, admitió: “puede ser que no hayamos ido lo suficiente rápido con la corrección fiscal. Creo que íbamos por el rumbo adecuado».
Por último, el ex funcionario deslizó: “Tenemos que movernos a una reforma laboral, tributaria, previsional, debemos abrirnos al mundo para construir una sociedad mejor”, y afirmó: «El Gobierno no celebró el acuerdo ni lo comunicó. No saben dónde ponerlo».
