Docentes rosarinos llevaron adelante este miércoles una toma simbólica de tierras en el Barquito de zona Norte, de Estanislao López y avenida Francia, para exigir por un plan de viviendas para el sector contemplado en la última paritaria docente.
“La ciudad muestra un importante contraste en torno al acceso a la vivienda propia y la especulación inmobiliaria. Los complejos habitacionales que se instalaron sobre la costa del río Paraná y en los alrededores de los grandes centros comerciales –Shopping- desnudan la política habitacional de fondo; la vivienda como un bien comercial y no como derecho”, dijeron desde el gremio.
También explicaron que “de los últimos emprendimientos inmobiliarios ubicados por la zona ninguno fue destinado a sectores con dificultades en el acceso a la vivienda, sino por el contrario, a sectores de gran poder adquisitivo”.
Desde Amsafé señalaron que la problemática también afecta al sector docente. La misma, está contemplada en la última paritaria del 2017 donde hasta el momento no hubo novedades y que en la última acta paritaria uno de los temas fue el de vivienda.
“Hemos pedido un informe sobre las reuniones de paritarios con el gobierno y nos informaron que no se han reunido. Desde Amsafe Rosario queremos visibilizar esta cuestión, necesitamos respuestas para el sector”, dijo Claudia Rivas, docente y secretaria Administrativa de la delegación gremial de la ciudad.
Con relevamiento propio
Según un relevamiento realizado por Amsafé Rosario sobre el sector para saber cuántos docentes no tienen vivienda propia reflejaron número preocupantes. “Este año hemos hecho un muestreo sobre 1.500 docentes, de los cuales un 80 por ciento alquila, y en su mayoría destinan más del 60 por ciento del sueldo al pago del alquiler”, precisó Rivas.
Tomando de referencia un salario básico docente (15.481 pesos), más de la mitad del salario se destina al pago de alquiler, impuestos y servicios, entre otros.
Salario $15.481, alquiler: $9.590, gasto promedio de impuestos $3.250, lo que les queda, según Rivas, $2.641 para vivir.
Con respecto a esto, desde el gremio docente destacaron que vienen participando de la elaboración del Proyecto de Alquileres que se impulsa en la provincia de Santa Fe, donde se propone que el Estado sea el garante para que todos los trabajadores estatales que no posean garantías propietarias ni salariales, puedan acceder a un alquiler de una vivienda sin inconvenientes.
Caja negra
“En la municipalidad hay un banco de tierras, cuando preguntamos sobre esto nadie supo decirnos cuál es la cantidad de dinero, ni de tierras que posee este banco. Cuando se venden grandes predios para construcciones, la municipalidad lo hace a precios irrisorios y no hay ninguna información sobre la cantidad de tierra que puede ser destinada a la construcción de complejos de vivienda; más que un banco de tierras es una caja negra”, enfatizó Rivas.
El estado ausente
«No hay programa que contemple la construcción de viviendas sociales. La provincia viene desarrollando el programa “Mi tierra, mi casa”, que promueve el acceso a suelo urbanizado y vivienda por parte de sectores que hoy encuentran dificultades para acceder a una solución habitacional, con valores muy por debajo de lo que ofrece el mercado. Sin embargo el último sorteo realizado fue en el año 2014. Es necesario un banco de tierras donde haya loteos sociales, que permita regular los costos de los terrenos y de las viviendas”, concluyó la dirigente gremial.