La niña asesinada fue identificada como Xiomara Ailen Vallejos, quien murió anoche a las 23.30 mientras era atendida en el Hospital Central de Reconquista, adonde había sido ingresada durante la tarde del lunes a causa de politraumatismos y trauma craneoencefálico grave, por lo que fue intervenida quirúrgicamente.
Cuando la madre de la menor de edad, identificada como María Adelina Vallejos, fue interrogada por el origen de los golpes que presentaba, reveló que se los había causado su pareja, Bruno Luis Martínez, quien fue detenido por la División Trata de Personas de la Policía de Investigaciones (PDI) ayer al mediodía, detallaron las fuentes.
La niña ingresó al hospital con múltiples lesiones y, tras ser intervenida quirúrgicamente, permaneció internada en terapia intensiva con asistencia respiratoria mecánica y sedación analgésica.
En cuanto a Martínez, que fue detenido a raíz de la agresión, ahora será imputado por la fiscal Georgina Díaz, del Ministerio Público de la Acusación (MPA), en una causa que fue caratulada en forma provisoria como homicidio agravado por ensañamiento y alevosía.
La fiscal dispuso una serie de pericias en la vivienda donde fue agredida la niña y la correspondiente autopsia para determinar en forma fehaciente las causas de la muerte, a la vez que requirió informes sobre denuncias previas por maltrato, aunque en principio no existen registros al respecto.
Voceros sanitarios indicaron que Xiomara presentó convulsiones debido a un hematoma subdural, motivo por el cual fue intervenida el lunes a la tarde, en tanto la cirujana Soledad Gamarra indicó que la operación había sido exitosa, pero que el cuadro era muy grave, por lo que requirió asistencia respiratoria mecánica y «sedación analgésica» para ser estabilizada hemodinámicamente.
«Ingresó con politraumatismos y trauma craneoencefálico grave, producto de maltrato. Tenía convulsiones por el hematoma que tenía en la cabeza», indicó a radio 10 de Reconquista el médico Nito Mansur, del área de terapia intensiva del hospital.
Luego, Mansur dijo que la menor presentaba además signos de abuso sexual y demás lesiones en todo el cuerpo, por lo que hay que evaluar si eran de reciente data o no.
Por otra parte, fuentes de la Delegación de Niñez, Adolescencia y Familia de Reconquista indicaron que no había denuncias previas por violencia y que la nena convivía con su madre, con Martínez y una hermana de 7 años.