La ciudad de Reconquista tiene desde ayer una ordenanza que promueve el cupo laboral trans. Si bien las organizaciones del departamento General Obligado celebraron la nueva normativa, cuestionaron que tenga un espíritu muy distinto al de la ley que hace una semana sancionó la legislatura santafesina: los trabajos en los distintos poderes del Estado local no serán efectivos sino que funcionarán como una suerte de pasantía para que quienes accedan a ellos cuenten con experiencia comprobable para sumar a sus currículums.
El proyecto para la ordenanza fue presentado en el Concejo Municipal de Reconquista a mediados de este año. Pero a diferencia de la ley que hace una semana sancionó la legislatura de Santa Fe, no fue el producto del trabajo colectivo de legisladores y organizaciones con trayectoria en la lucha por reivindicaciones del colectivo travesti-trans, sino que fue presentado por Oliver Puig, un joven trans, en forma particular.
La ley que el 31 de octubre pasado sancionó la legislatura santafesina establece el cupo laboral para personas travestis, transexuales y transgénero en los tres poderes del el Estado, del 5 por ciento sobre el total de personas que hayan registrado su cambio de identidad. Además, alienta la contratación de personas de ese colectivo en el sector privado. En Santa Fe hay entre 1.000 y 1.200 personas que ya accedieron al cambio de identidad en el Registro Civil, por lo que cuando se reglamente la ley de cupo entre 50 y 60 personas podrán acceder a un puesto laboral. En la provincia de Santa Fe 10 localidades han sancionado ordenanzas que establecen un cupo laboral del 5 por ciento para travestis y trans.
El espíritu de la ordenanza de Reconquista es otro: no abre las puertas a tener un trabajo permanente en el Estado sino a “sentar precedentes” a través de contrataciones temporales para que los y las beneficiarias cuenten con algún tipo de experiencia en su currículum. “Desde Red Diversa Positiva celebramos que se haya aprobado el proyecto, pero lo cierto es que hay cosas que no quedan claras, como por cuánto tiempo son las contrataciones. Tampoco habla de porcentajes ni de cómo serán los concursos”, opinó Carina Santa Cruz, militante de esa organización.
“Desde la Red veníamos armando un proyecto que tuviera el mismo espíritu que la ley provincial, que fuera consistente y que incluyera a todas las compañeras. Las que tienen más de 40 años no pueden estar esperando a que son den un trabajo sólo para sentar un precedente. Quieren dejar de vivir económicamente de la calle, y esta ordenanza no apunta a eso”, remarcó Santa Cruz.
De hecho, las militantes de organizaciones travestis y trans de Reconquista no fueron notificadas de que este jueves de trataría esa normativa en el recinto, por lo que ni siquiera pudieron presenciar la sesión.
