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Reconversión industrial y negociación política: las bases santafesinas para subirse al Rigi

El gobierno provincial, con apoyo de la Federación de Industriales, incentiva al sector a transformarse en proveedores de bienes y servicios de la minería, gas y petróleo. Esto demanda una nueva configuración de la matriz productiva y negociar con las provincias que priorizan a proveedores locales

El gobierno provincial apuesta a reconvertir la industria de la región para sacarle provecho al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (Rigi). El objetivo, en conjunto con la Federación de Industriales de Santa Fe (Fisfe) es direccionar la producción hacia el mundo de la minería, el petróleo y el gas, una alternativa a la sostenida crisis que atraviesa el sector en estos últimos meses a raíz de la profunda caída en la demanda interna.

En ese sentido, se dio una importante convocatoria de la que participaron este lunes por la tarde más de 200 industriales santafesinos de distintos rubros. Muchos de ellos, atravesados por la crisis que ocasiona el modelo económico implementado por el gobierno de Javier Milei, buscarán a través de la Mesa de Petróleo, gas y minería una vía para proveer a los beneficiados por el Rigi.

Del encuentro participó el gobernador Maximiliano Pullaro, quien señaló: “Muchas provincias tenemos la inmensa capacidad de abastecer a esos emprendimientos que van a venir a Argentina. Para eso tenemos que estar preparados. Tienen que reconvertir sus empresas y para eso está el Estado”.

Cabe recordar que el Rigi fue uno de los capítulos más discutidos durante el tratamiento de la Ley Bases, y que terminó siendo aprobado gracias al apoyo de las provincias, entre ellas Santa Fe.  Se trata de un esquema de flexibilización impositiva, aduanera y cambiaria para que, a las compañías que inviertan más de 200 millones de dólares en el país se les garantice estabilidad fiscal durante 30 años, entre otros beneficios.

El optimismo provincial para sacar provecho del Rigi y abastecer a los sectores beneficiados, deberá ir de la mano de acompañamiento al sector y de gestión política. En primer lugar, ya que la reconversión productiva no se dará de un día para el otro, y en segundo orden ya que Santa Fe se encuentra en desventaja respecto a otras provincias.

Si bien dese Fisfe acompañan el anuncio, saben que para cualquier pyme de la región será una tarea ardua direccionar sus procesos productivos hacia el mundo del petróleo el gas y la minería. Pero además, el abastecimiento a estos sectores requiere de ciertas normas de calidad que garanticen un adecuado servicio o producto.

Por su parte el gobierno provincial deberá tejer alianzas estratégicas con otras provincias para posicionarse como proveedora. Esto implica también negociar con los distritos que van a albergar el desembarco de las grandes inversiones, ya que suelen contar con leyes de compre local. Esto implica que deben darle prioridad a sus proveedores, o aquellos radicados en ese territorio, como es el caso de algunas empresas santafesinas que ya lo hicieron.

Al respecto, el ministro de Producción santafesino, Gustavo Puccini, señaló: “Cada provincia tiene un compre local, y las mineras no dejan de tenerlo. Eso traba a nuestras industrias porque no se puede competir en igualdad de condiciones. Hay algunas empresas nuestras que decidieron instalarse allá porque tienen mejores beneficios. Aquellas barreras tienen que llevarnos a un diálogo para eliminarlas o bajarlas. Si las inversiones tienen la magnitud de la que se habla, no va a alcanzar solo con las industrias locales”.

En el mapa de provincias que se verán beneficiadas en mayor medida por la concreción de proyectos mineros aparecen: Jujuy, Salta, Catamarca, San Juan, Mendoza y Chubut. Por su parte, Neuquén se anota como una de las mayores beneficiarias en hidrocarburos.

Desde el sector industrial, el presidente de la Fisfe, Javier Martín, sostuvo: «Santa Fe tiene muchísimo que ofrecer a este sector, y como industriales tenemos una enorme responsabilidad. Hoy en la provincia tenemos herramientas disponibles: líneas a tasas subsidiadas, el programa Tecno-Industria, y hay que utilizarlas para un gran desafío, la transformación digital. La oportunidad es enorme, y esta mesa es un ámbito institucional en donde podemos aprender en conjunto y, todos aquellos que ya tienen experiencia, volcarla, para que la industria de Santa Fe sea un jugador clave”.

 

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