Ante la ola de mosquitos que azota la ciudad en los últimos días, se reforzaron desde esta mañana los operativos de fumigación para evitar su proliferación. Las intervenciones tienen como finalidad reducir las poblaciones de la especie común que afecta el bienestar de los vecinos, especialmente en los espacios verdes de uso masivo y en aquellos barrios que cuentan con drenajes a cielo abierto, donde se ha monitoreado una mayor presencia.
Los trabajos se desarrollan en todo el sector costero de la ciudad, desde el parque Regional Sur, pasando por los parques de la Bandera, de las Colectividades, Scalabrini Ortiz y Alem, Costanera Norte y parque Oeste, entre otros.
Dadas las lluvias de los últimos días, a las que le suman las altas temperaturas propias de la época estacional, que favorecen la proliferación de insectos, la Secretaría de Servicios Públicos y Medio Ambiente de la Municipalidad continúa reforzando las tareas de fumigación para el control del denominado “mosquito común” en parques y plazas y barrios con cunetas.
En este sentido, se informó que la Dirección de Vectores profundizó los trabajos en los espacios verdes de la ciudad, dada la proximidad del fin de semana, momento en el cual hay mayor aglomeración y afluencia de gente. Así, durante la mañana de hoy se realizaron fumigaciones en todo el sector costero de la ciudad.
Así mismo, por la tarde fueron planificadas intervenciones en los barrios Modelo, Triángulo y Godoy, y en el sector comprendido por avenida Pellegrini, Godoy, boulevard Avellaneda y Rouillón, en tanto está previsto continuar con los trabajos de fumigación durante los días subsiguientes en el resto de los distritos de la ciudad.
Para ello, se dispuso de cinco equipos que trabajan en las primeras horas de la mañana –entre las 6 y las 8— para que las aplicaciones del producto que combate al mosquito adulto sean más efectivas, no afecten al tránsito vehicular y de personas y, dada la menor intensidad de los vientos, perduren más tiempo en el aire.
A su vez, en los horarios de media mañana y primeras horas de la tarde se intensifican las tareas de control larvario, que consisten en la aplicación de larvicidas en zanjas donde es posible combatir al insecto de forma más eficiente. Dichas intervenciones tienen como finalidad reducir las poblaciones de esta plaga que afecta el bienestar de los vecinos, especialmente en los espacios verdes de uso masivo, y en aquellos barrios que cuentan con drenajes a cielo abierto, donde se ha monitoreado mayor presencia de la especie.
Los tratamientos que se vienen realizando incluyen aplicaciones espaciales por termonebulización (fumigaciones) para el control de los mosquitos adultos, y un importante trabajo preventivo de control larvario. Los productos que se utilizan tienen una toxicidad nula para el ser humano.
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