La Secretaría de Control municipal informó que durante este fin de semana se registraron 40 casos de alcoholemia positiva. En uno de los operativos, se detectó un conductor con casi 3 gramos de alcohol en sangre.
Los procedimientos fueron encarados por agentes de las áreas de control junto a efectivos de la Policía de Santa Fe en distintos puntos de la ciudad a fin de promover “conductas responsables al volante”.
El secretario Guillermo Turrin confirmó que entre la noche del jueves pasado y este domingo a la mañana, se hicieron 320 intervenciones en las que se fiscalizaron la tenencia de documentación y elementos de seguridad reglamentarios así como también, se realizaron test de consumo de sustancias prohibidas en la conducción.
Durante las tareas se remitieron 52 autos y motos, de los cuales, 40 fueron por alcoholemia positiva. La repartición municipal detalló que el índice de alcohol en sangre medido más elevado fue de 2.84 gramos, cuando el máximo permitido es de 0.50 gramos.
En tanto, el resto de los traslados fueron por irregularidades de los documentos y condiciones de seguridad vial.
«El consumo de alcohol al volante es sumamente peligroso. Los controles nocturnos permiten detectar conductores que tras haber bebido salen a la calle con sus facultades de reacción disminuidas y que ponen en riesgo sus vidas y las de los demás», indicó Turrin.
«Este fin de semana registramos un caso gravísimo de un conductor que superó en más de dos gramos el límite permitido de ingesta alcohólica», señaló y advirtió: «No vamos a tolerar este tipo de conducta irresponsable y arriesgada. Es por eso que reforzamos nuestra presencia en la vía pública, atentos a evitar los costos más caros de la infracción».
