Londres sumó un nuevo round con el país y en medio de la creciente tensión bilateral, según confirmaron fuentes de la Marina británica a Ambito.com el ministerio de Defensa británico enviará a las islas Malvinas en los próximos meses uno de los barcos de guerra más modernos de la Royal Navy (Marina).
Se trata del destructor «HMS Dauntless», Tipo 45, que partirá en los próximos meses, sin fecha concreta, hacia el Atlántico Sur y que sustituirá a la fragata británica «HMS Montrose». Según la cartera de Defensa, el despliegue ya estaba programado.
«La Royal Navy ha tenido una continua presencia en el Atlántico Sur durante muchos años. El despliegue del HMS Dauntless al Atlántico Sur estaba planeado desde hace tiempo, es (una medida de) rutina y reemplaza a otro barco de patrulla», afirmó el vocero del ministerio, según la agencia EFE.
El «HMS Dauntless» es uno de los seis nuevos destructores Tipo 45 con que cuenta la Marina británica y está equipado con un avanzado sistema de navegación que hace difícil que pueda ser detectado por radar. Lleva además, misiles antiaéreos de alta tecnología Sea Viper y pueden transportar a unos sesenta efectivos militares, además de contar con una cubierta para acomodar a helicópteros tipo Chinook.
Por otra parte, el secretario de Estado de Asuntos Exteriores del Reino Unido, Jeremy Browne, quien apoyó en un debate en el parlamento la posición de David Cameron, ratificó que la soberanía de las Islas «no es negociable». «Vamos a seguir los pasos necesarios para garantizar la seguridad» de los kelpers, agregó el secretario de Estado británico.
Además, el funcionario británico remarcó que la voluntad es «mejorar la relación» con la Argentina, pero evitar las discusiones sobre ese territorio del Atlántico sur. «Las islas no son negociables», manifestó esta mañana el secretario de Estado de Asuntos Exteriores británico.
Sus declaraciones se producen en medio de los nuevos cruces diplomáticos que provocaron las palabras de Cameron, quien calificó a la Argentina como «colonialista» por insistir con su reclamo sobre la soberanía del archipiélago del Atlántico Sur.
«Queremos formar alianzas (con la Argentina) pero las islas no son negociables», reiteró para luego resaltar que los habitantes de las Malvinas transitan un «gran momento» por la exploración petrolera y demás actividades económicas que se llevan adelante en esa región.
Este año se cumple el trigésimo aniversario de la guerra que enfrentó a los dos países por la posesión de las Malvinas, que terminó el 14 de junio de 1982 con la rendición de Argentina. En el conflicto bélico murieron 255 militares británicos y más de 650 argentinos.