Candela Ramírez
El 19 de octubre es el Día Internacional de Lucha contra el Cáncer de Mama. Fue declarado por la Organización Mundial de la Salud –OMS– con el objetivo de crear conciencia y promover que cada vez más mujeres accedan a controles, diagnósticos y tratamientos efectivos. La detección precoz es fundamental.
En la ciudad de Santa Fe existe, desde fines de 2016, el grupo Chicas Pink: por entonces cuatro mujeres empezaron a remar porque una de ellas tenía conocimiento de que esta práctica era beneficiosa para mujeres que hubieran tenido la enfermedad. Así empezaron y a mediados de 2019 se conformaron como asociación. Hoy son 25 mujeres, la mayoría padeció cáncer de mama en algún momento y ya han sido dadas de alta. Este viernes 22 de octubre realizarán la botadura, la ceremonia en la que navegarán por primera vez por la laguna Setúbal con su bote dragón que adquirieron en marzo de este año.
Desde el inicio su objetivo fue conseguir esta embarcación china. Se trata de un bote largo y angosto, en el que se palea con un solo remo. Una persona va a derecha y otra a la izquierda del bote. Tiene cinco asientos, cada uno para dos personas, con lo cual entran diez remando. En cada grupo que navega se dividen según el peso para lograr un mejor balance. A su vez, adelante se posiciona un drummer, que marca el ritmo y un timonel que guía. Todas deben ir al mismo ritmo para que se mantenga estable, el esfuerzo es conjunto.
La práctica deportiva es recomendada para sobrevivientes del cáncer de mama a partir de la experiencia de un médico canadiense, Donald McKenzie, que demostró beneficios en la recuperación de pacientes que hayan atravesado una cirugía oncológica mamaria. Para Chicas Pink no solo se trata de una práctica deportiva sino también de un trabajo en equipo que fomenta la colaboración y el vínculo entre sus integrantes. Para realizar la actividad deportiva fueron capacitadas en el Club Náutico Azopardo, en Santa Fe, donde se encuentra su bote que adquirieron con fondos del gobierno provincial. Este viernes, de hecho, estará presente el gobernador Omar Perotti.
Viviana Marín integra el grupo y dijo a El Ciudadano que han participado de muchos encuentros en la provincia y en el país orientados a la toma de conciencia en la población: “El objetivo de las asociaciones son el remo en bote dragón y la concientización siempre avalado por algún profesional. Además, somos madrinas del grupo en Rosario”. En la ciudad el nombre del colectivo es Rosa Río, se conformaron en 2019 y desde entonces practican remo.
Según contó a El Ciudadano, la instructora del equipo, Carola Saá, la formación del grupo fue en el marco del Primer Encuentro Nacional de Mujeres del Agua, realizado en septiembre de 2019.
Hicieron su primera clase en a mediados de 2019 en una pileta climatizada que facilitó la Municipalidad de Rosario, para que las mujeres tengan su primer contacto con el kayak y para enseñarles maniobras de auto rescate. Las siguientes salidas fueron en el río, desde la Guardería La Florida. Aún no cuentan con un bote dragón porque se exportan desde China y los costos son muy altos, pero esperan poder contar con uno eventualmente.
Breast in a Boat fue el primer grupo de mujeres que sobrevivieron al cáncer en 1996, en Canadá, a partir de la investigación de McKenzie, de la Universidad de British Columbia. El estudio demostraba que el movimiento repetitivo de remo en este tipo de botes ayuda a la recuperación de la musculatura del torso superior. Además, reduce la posibilidad de desarrollar lifedema, deshincha los brazos y fortalece los músculos.
Hay por lo menos 200 equipos de remo de mujeres que tuvieron cáncer de mama en el mundo. En Argentina hay por lo menos 14 equipos en lugares como Neuquén, Bariloche, Baradero, Córdoba, La Plata, Corrientes. La mayoría tiene membresía de la IBCPC (International Breast Cancer Paddlers Commission).
En Argentina, el cáncer de mama es la primera causa de muerte por tumores en mujeres, provocando 5400 muertes por año. Las tasas de mortalidad por este cáncer más elevadas se dan entre los 50 y los 80 años o más. Al menos un por ciento de los cánceres de mama se dan en hombres y más del 75 por ciento de las mujeres que lo padecen no tienen ningún antecedente familiar de dicha enfermedad.
La detección temprana de esta enfermedad es fundamental, ya que los tumores de menos de un centímetro tienen hasta el 90 por ciento de probabilidades de curación. Por eso es importante hacer los controles ginecológicos anuales y prestar atención a cualquier cambio físico para poder consultar con un médico.
Comentarios