Destacando principalmente que la de ellos es una actividad cada vez menos rentable y que les resulta cada día más difícil prestar el servicio tal como lo establece la ordenanza, los titulares de la Cámara de Remises se reunieron ayer con integrantes de la Comisión de Servicios Públicos del Concejo Municipal para solicitar un incremento en la tarifa –reclaman una cifra cercana al 30 por ciento–, la incorporación del cobro de dos fichas por minuto en caso de espera, una tarifa mínima con un mínimo de recorrido, que dejaría el viaje más barato en 13 pesos, y la reducción a la mitad de las cuotas de derecho de adjudicación en las nuevas chapas. “No es posible que la gente ponga un peso más de lo que vale el colectivo y cuatro personas vayan a trabajar en un auto que los pasa a buscar por la puerta”, se quejó el titular de esa asociación, Alfredo Gordo.
“Estuvimos en el Concejo por tres o cuatro puntos que nos interesa tratar. Entre ellos estaba incluido desgraciadamente, resulta antipático decirlo, el tema de la necesidad de un aumento pero no queda otra porque nosotros no tenemos un quiosco, como siempre decimos, donde si el caramelo aumenta un diez por ciento aumentamos el ocho. Nosotros tenemos una tarifa durante un año, un año y pico a veces, y no podemos modificarla”, explicó el remisero.
A la hora de enumerar razones, Gordo contabilizó cómo afecta la inflación de manera directa a los trabajadores del sector. “Ahora tenemos liberado el precio del gasoil y de la nafta y la pregunta es cómo hacemos nosotros con esto. Nos estamos descapitalizando terriblemente, necesitamos una cláusula gatillo porque si no estamos perdiendo continuamente. Para que se entienda, la pregunta es a cualquiera que tenga un auto: «¿usted tiene vehículo? ¿le aumentó el seguro últimamente?». A mí también. Las cubiertas me aumentaron, el combustible aumentó, los repuestos aumentaron, los vehículos aumentaron. Unidades que estaban valiendo 70 mil pesos a fin de año han aumentado en pocos meses en promedio siete u ocho mil pesos”, añadió.
“La gente se tiene que concientizar que estamos hablando de la tarifa de un remís, que además es nuestro y no es de una empresa porque ninguna empresa tiene coches. Si fuera rentable esto, las empresas los tendrían. Si esto fuese rentable no se hubiesen devuelto 130 chapas como se devolvieron. Hoy no es rentable esto. Estamos pidiendo lo razonable, lo que más o menos están saliendo los aumentos en todos lados: entre un 25 y un 30 por ciento. Nosotros andamos en un 30 por ciento porque pedir más desde nuestro punto de vista sería negativo, entonces seguiremos absorbiendo los costos ”, continuó.
Aparte del aumento, la Cámara de Remises solicitó modificaciones en al actual sistema de tarifas. “Además, pedimos para amortiguar un poco un costo mínimo a través de un viaje mínimo. No podemos tener vehículos que valgan 100 mil pesos para hacer un viaje de ocho pesos y después volvemos a la base. Lo que proponemos es un servicio mínimo con dos kilómetros incluidos. El kilómetro está en este momento 2,50 pesos, entonces, a la ficha se le sumarían los dos kilómetros más la bajada de bandera por lo que el viaje mínimo se iría aproximadamente a 13 pesos. O sea, algo para que se justifique mover el auto. A mí en lo personal me a tocado hacer viajes de una cuadra”, graficó.
“Yo le digo a la población: yo no voy a comer al Mercurio porque a mí no me da. El servicio de remís es un servicio diferencial. No es posible que la gente ponga un peso más de lo que vale el colectivo y cuatro personas vayan a trabajar en un auto que los pasa a buscar por la puerta con coches de alta gama y con nosotros con pantalón de vestir, camisa de vestir y corbata, todas cosas que desgraciadamente tienen un costo”, comentó el titular de la cámara.
El otro pedido del sector se refirió a una reducción de la cuota de derecho de adjudicación de 1.800 pesos a 900 pesos mensuales en concepto de nuevas chapas de remises. Parte de esas nuevas licencias fueron otorgadas hace tres meses a pedido de los propios choferes. Si bien los montos de las cuotas fueron acordados, ahora los titulares argumentan aumentos en los precios de los automóviles.