El Concejo Municipal de Rosario trabajó esta semana en comisiones los proyectos de revitalización del área central que elevó el Ejecutivo. Las propuestas buscan un reordenamiento urbanístico del centro, principalmente en las peatonales Córdoba y San Martín y las calles San Juan y Maipú.
Los proyectos en cuestión son cuatro, uno para modificar la actual ordenanza 8.243 de “Reordenamiento Urbanístico del Área Central”; otro que busca definir alturas máximas admitidas para el corredor urbano de calle Maipú, entre Pellegrini y Urquiza; otro con adaptaciones al “Plan Especial de Calle San Juan” y el restante busca renovar el uso de playas de estacionamiento en la zona.
Desde el oficialismo, destacaron que las propuestas forman parte de un plan integral del municipio para intervenir y revitalizar el centro. “No se aspira a que la revitalización pase únicamente por esto, sino que se tenga un conjunto de iniciativas. Por ejemplo, ya iniciamos el diálogo con galerías comerciales para reconfigurar la actividad “, explicó el concejal de Creo, Fabricio Fiatti.
Con respecto al reordenamiento vehicular de la zona, desde el municipio explicaron que el objetivo es evitar “que el centro sea un lugar de paso para autos” y que los rosarinos no tengan que atravesarlo cuando se dirijan a otros puntos de la ciudad.
Tanto para calle Maipú como San Juan, los anteproyectos buscan restringir que las futuras construcciones que se realicen en el lugar tengan cocheras o viviendas en la parte frontal de la planta baja. “Deberán ser en la parte interior de los lotes, y en el frente se deberán generar locales comerciales”, destacó Fiatti.
En tanto que la propuesta para los desarrollos en la zona peatonal, el Ejecutivo buscará “generar alturas y terrazas que permitan otras perspectivas del entorno urbano”. “Se priorizará al peatón, la caminabilidad, y otros elementos visuales urbanos que hay en esa zona, que se entiende pueden generar un espacio importante”, sostuvo el edil oficialista.
Críticas opositoras
Entre las principales críticas a los proyectos, la presidenta de la comisión de Planeamiento, Fernanda Gigliani, se refirió a los inmuebles que son considerados como “patrimonio”. “En la práctica se dan desinteligencias. Por ejemplo en calle San Juan se incorporan inmuebles a protección de entorno y en el caso de peatonal se descatalogan”, señaló.
Gigliani también hizo una observación general respecto a la modalidad del Ejecutivo de enviar cuatro proyectos diferentes del área central, a la cual calificó de «desacertada». La edila mencionó “como más conveniente para trabajar” una norma del área central en general y luego sí ahí plantear las especificidades de cada caso.
Otro tema de importancia para la concejala aliada al PJ, tanto por demanda de vecinos como de comercios a cielo abierto, es cómo garantizar la oferta de estacionamiento. «Sin embargo, en varias normas se plantea la no exigencia de construir cocheras, como incentivo para lograr la construcción, entiendo debería compensarse con otra política que garantice la demanda de cocheras”, explicó.
Por otra parte, la presidenta de Planeamiento y Urbanismo avanzó en la crítica de prohibir viviendas de planta baja y también objetó la idea de ampliar peatonales.
En cuanto a las playas de estacionamientos, adelantó que no coincide con plantear indicadores urbanísticos determinados por el Ejecutivo. Por último, pidió acordar en establecer una metodología de trabajo concreta.
Por su parte, la concejala del peronismo Marina Magnani aseveró que en las propuestas “no se ven acciones de revitalización” y destacó como fundamental “establecer qué es lo que se pretende construir y pensar en exenciones de TGI o DREI para orientar a un público trabajador”.
“Necesitamos circulación de gente viviendo en la zona y no solo personas que compren un departamento en Rosario para utilizarlo los fines de semana”, reflexionó.
Por su parte, Jésica Pellegrini, de Ciudad Futura, aseguró que en líneas generales preocupa que la revitalización esté puesta en un enfoque de mayores alturas y volúmenes constructivos. Esto además, según la concejala opositora, no tiene un resguardo en cuanto a la movilidad porque se suprimen estacionamientos.
Otro punto en el que se detuvo es la situación de la protección de inmuebles catalogados como patrimoniales, donde alertó que “lejos de dar herramientas de mantenimiento para los mismos, se genera algo contrario con esta normativa que es dar la posibilidad de otorgar mayor altura a los linderos”.
Sobre el final del debate, los ediles acordaron pasar a un cuarto intermedio y retomar el trabajo el próximo lunes 4 de octubre.
