El destacado mediocampista de Boca Juan Román Riquelme celebró este mediodía que pudo moverse y entrar en contacto con la pelota, con la intención de poder jugar el domingo, frente a Banfield. «Estoy contento que ayer pude trotar, hoy también pude tocar la pelota. Siento la molestia de lo que me han lastimado con el tema de los pinchazos. Hoy pienso en mañana y el objetivo es estar en la cancha el domingo», planteó.
Riquelme brindó hoy una conferencia de prensa en Casa Amarilla, donde planteó que para Boca, la obtención del título de campeón del Torneo Apertura de Fútbol de Primera División, no es difícil.
«¿No se sabe cuándo juega Tigre, no? Ojalá que juegue el martes o el miércoles. Nosotros tenemos que empatar o ganar. La diferencia la tenemos hecha. Si no ganamos este campeonato, nos tenemos que ir a casa», indicó.
Riquelme no se pronunció acerca de las elecciones que el club tendrá el domingo pero dejó un mensaje sugestivo, apuntando a su continuidad. «En unas elecciones nunca vi un empate. Uno va a ganar. El que gane ojalá que haga las cosas bien. Que el club sea cada día más grande. Quiero estar y quiero jugar. Pienso en el partido del domingo, en volver a salir campeón», sostuvo.
Pero añadió: «Ojalá que el club me ayude. Después, soy de ponerme objetivos. Sé que a (Roberto) Mouzo lo tengo muy lejos. Me lleva como 100 partidos. Ojalá pueda seguir jugando mucho tiempo acá».
«Veremos durante el día si la cosa sigue igual, quiero que no me moleste. Veremos cómo va y lo que voy a hacer. Tengo que pensar en el día de mañana», explicó.
Riquelme siguió diciendo: «El domingo es especial para nosotros. Esta es la tercera vez que me tuve que hacer pinchar. El objetivo es estar en la cancha pero todavía falta mucho». El crack reiteró que cuando firmó su contrato prometió un campeonato y enfatizó que está por cumplir.
«Este año jugué como en la Copa 2007. La diferencia es que no hice tantos goles. Hace mucho que no salgo campeón con mi equipo, con esta camiseta que es lo que me queda por cumplir», manifestó. En cuanto a su expresión de deseos, se mostró proclive a que en Boca vivan una Navidad tan linda como en 2008.
Por otra parte, se mostró convencido de que Boca es el mejor de este Torneo Apertura y rechazó que juegue mal. «Si es el que juega mal, hay que preocuparse por los demás. Si el que sacó nueve puntos de ventaja al primero que viene atrás juega mal, ¿qué queda para los otros?», preguntó.
En referencia a las elecciones, Riquelme señaló: «Lo único que me interesa es el partido. Acá echaron a (Miguel) Russo porque no le pudo ganar una final del mundo al Milan. Que es normal. Acá llegó un momento en que no se podía perder con nadie. Ni con Milan ni con Real Madrid».
«No se valoraban los campeonatos, lo que cuesta ganarlos, el esfuerzo. No se valoraba nada. Ahora el equipo está por salir campeón. Lo más importante que tiene este club es el partido del domingo, pero se habla solamente de las elecciones», dijo en tono quejoso.
Volviendo al fútbol, precisó que cuando se le ganó a Lanús, los jugadores se convencieron de que Boca iba a pelear el campeonato hasta el final. «Vencimos a un gran rival», dijo, mientras que durante la conferencia elogió a todos sus compañeros y entre los rivales mencionó especialmente a Teófilo Gutiérrez, de Racing, a quien dijo que observó en gran nivel anoche, por la Copa Argentina frente a El Porvenir.
También reveló que a Julio Falcioni siempre le dice que lo quiere tener como director técnico por mucho tiempo. Enfatizó que lo único que quiere desde hace unos meses es jugar un partido completo, porque está lesionado y advirtió que no miente.
«Me pincharon tres veces, hace unos años tuve un problema parecido en el otro pie y un sinvergüenza dijo que pisé un carbón. Yo no miento», dijo.
Este jueves, en el entrenamiento, Riquelme se movió aparte del grupo principal y no participó del ensayo formal de fútbol. Caminó y trotó después de que el lunes fue infiltrado nuevamente y se apresta a jugar ya que en el cuerpo técnico opinan que es uno de los pocos que no necesita practicar fútbol antes de los partidos.