Dos ametralladoras FMK-3 fueron robadas de una Comisaría de la ciudad correntina de Perugorría, por lo que el ministro de Seguridad provincial, Buenaventura Duarte, decidió pasar a disponibilidad al encargado de la sede policial y a los subalternos.
El insólito hecho habría sucedido el fin de semana pasado, pero la Unidad Fiscal de Investigaciones de la ciudad de Curuzú Cuatiá recién recibió el reporte el miércoles por la tarde.
Según la información que obtuvo el medio Época «el jefe de la comisaría de Perugorría le dijo a la fiscal subrogante Cristina Gómez que estuvo en la dependencia hasta el domingo último y cuando regresó el miércoles ‘notó el faltante de dos subfusiles FMK-3 que guardaba dentro de un fichero junto con un casquete que también robaron’. Increíblemente, también se llevaron la campera del comisario».
Ante el conocimiento del robo, se realizaron allanamientos y se secuestró el libro de guardia. Además, confirmaron que se abrieron sumarios masivos a todo el personal.
En las últimas horas del jueves, el ministro de Seguridad de la provincia informó que «se pasó a disponibilidad al jefe y a un grupo de oficiales».
A su vez, relató cómo se dio cuenta el superior sobre el robo: «El comisario primero observó el faltante de un termo. Al otro día revisó su fichero y faltaban las armas».
Por último, el funcionario resaltó que la investigación está en manos de la Fiscalía de Curuzú Cuatiá que trabajan en conjunto con el Director General de Coordinación de Interior de la Policía: «La Unidad Regional realizará un monitoreo en tanto dure la investigación».
El FMK-3 es un subfusil argentino de fuego selectivo, accionado por retroceso de masas, diseñado por Fabricaciones Militares en 1974. Es un arma calibre 9 mm, con una cadencia de tiro de seiscientos cincuenta disparos por minuto.