La Justicia logró desbaratar a la banda que el pasado 6 de junio robó 3,5 millones de pesos del Correo de la localidad santafesina de Diego de Alvear que estaban destinados para abonar las jubilaciones, mientras los abuelos formaban fila fuera del establecimiento para cobrar sus haberes. El dato curioso es la conexión política: entre los seis detenidos, producto de allanamientos en Capital Federal, Junín, y Diego de Alvear, figura el sobrino del presidente comunal Daniel Sagardía.
Fue el fiscal federal regional de Venado Tuerto, Javier Arzubi Calvo, quien oficializó las detenciones y el secuestro de una importante suma de dinero. En declaraciones a Radio Dos, el funcionario judicial expresó: “Fueron detenidas seis personas y queda un prófugo hasta ahora. Hubo cuatro allanamientos en Buenos Aires, uno en Junín y dos en Diego de Alvear. Se detuvo al jefe del Correo, a su asistente, una persona detenida en Junín y tres personas en la ciudad de Buenos Aires”.
“No puedo adelantar mucho porque la causa está en plena investigación pero indudablemente que tanto el pedido de la Fiscalía de los allanamientos y las detenciones, dan una señal de que estaríamos con serios elementos de prueba para responsabilizar a todas estas personas. Los que están detenido son personas que tuvieron un grado importante de participación en el hecho”, expresó Arzubi Calvo al referirse a la participación del sobrino de Sagardía.
Según publicó el sitio Infobae La clave para desbaratar a la banda comenzó por un dato que recabó la policía bonaerense. La fuerza descubrió que al Renault Sandero que utilizaron los delincuentes para dar el atraco, que se trataba de un vehículo y que posteriormente fue descartado, lo asistían otros dos vehículos: un Ford Focus y un Chevrolet Onix.
A partir de la averiguación de los titulares de esos dos vehículos, comprobaron que uno de ellos pertenecía a Walter P., con antecedentes por privación de la libertad.
En un paso posterior, y tras un rastreo de las conversaciones telefónicas, los pesquisas determinaron que Walter P. se comunicó en dos ocasiones y dos días antes del asalto con Fernando Sagardia, el sobrino del presidente comunal que vive en la localidad bonaerense de Junín.
El mismo día del robo, ambos teléfonos fueron rastreados en las antenas de la zona de Diego de Alvear. Y mantuvieron otra comunicación por la tarde del 6 de junio, luego del atraco.
Con esa información se motorizaron lo múltiples allanamientos en los que se encontraron 240 mil dólares, que bien podrían ser el resguardo en moneda extranjera del botín de Diego de Alvear o tal vez los frutos de otros atracos o actividades ilícitas.
El fiscal Arzubi Calvo se mostró satisfecho con los resultados: “Se secuestraron aproximadamente unos 240 mil dólares, que excede al cambio del día de hoy la suma que fue robada del Correo, los 3,5 millones de pesos. Además moneda extranjera, dólares falsos, muchos elementos que van a ser analizados en los próximos días. Me quedo con la satisfacción de que pudimos dar con la plata que se había secuestrado, que los jubilados recuperaron su dinero y aparte pudimos determinar quienes habrían sido los autores”.
Los detenidos serán indagados este jueves en los tribunales federales de Venado Tuerto.
El robo
El atraco tuvo lugar el 6 de junio a las 8.30 en la oficina de correos, donde cada mes se realiza el pago de haberes ya que en el pueblo no hay entidades bancarias ni cajeros automáticos. A esa hora, mientras algunos abuelos se acercaron a cobrar, un hombre que no alcanzaba los 40 años hizo también entró al lugar. Cuando el jefe del correo le preguntó qué necesitaba, le respondió “una transferencia”. Así que aguardó con el resto de los clientes.
Dos minutos después llegó el camión de caudales de la empresa Prosegur, cuyos empleados bajaron cuatro sacas llenas de billetes. Apenas se fueron del lugar, dos hombres descendieron de un Renault Sandero gris con parte del rostro cubierto con cuellos rojos y desenfundaron armas: “Todos al piso, esto es un asalto”, gritó uno de ellos mientras que la persona que ya estaba adentro del correo para realizar la supuesta transferencia se les acopló.
El trío no necesitó infligir más violencia que la exhibición de las armas de fuego. Lo que siguió, según los investigadores, duró segundos. De las cuatro sacas tomaron tres, una cada uno. La otra quedó en el correo mientras que el trío se subió al auto y huyó. El vehículo apareció abandonado a cuatro kilómetros del pueblo, a la vera de un camino rural de la localidad bonaerense de Iriarte.
Acusaciones cruzadas
El robo desató en su momento una serie de acusaciones entre el presidente comunal del PRO Daniel Sagardía y el senador provincial Lisandro Enrico, que representa al departamento General López donde pertenece la comuna de Diego de Alvear.
“Tenemos que brindar con champán porque no murió nadie”, dijo momentos después del atraco Sagardía y acto seguido cuestionó al Frente Progresista porque la pequeña localidad no tiene “una sucursal de algún banco o por lo menos un cajero automático para que no pasen estas cosas”. “Cualquiera puede robar lo que quiera en nuestro pueblo. No hace falta usar armas, con una gomera basta”, cuestionó.
Quien recogió el guante en aquella oportunidad fue el senador radical Enrico, quién tildó al ex dirigente peronista devenido en macrista de “mentiroso”. Y le recomendó a la Justicia que “investigue” lo investigue: “Por lo visto sabe mucho de cómo sucedieron los hechos, del auto en el que se trasladaban los delincuentes. Al primero que hay que citar a declarar o investigar es a Sagardía”.
Las acusaciones del presidente comunal se volvieron en su contra: la Justicia detuvo a su sobrino. Resta saber si hay o no algún tipo de vínculo referido al robo, más allá de la cuestión meramente familiar.
