Diez días a puro vóley. Diez días donde Rosario está en los ojos del mundo. Diez días de la ciudad siendo sede de otro Mundial, una situación que se viene repitiendo año tras año. Diez días de saque, recepción, remate y bloqueo. Diez días para disfrutar del deporte.
Rosario, por su rica historia deportiva, se ha caracterizado por organizar grandes eventos. Y el que se está desarrollando en estos días no es la excepción. La organización de la Copa del Mundo femenino Sub 18 transita por los carriles normales con diez selecciones que están disputando la etapa clasificatoria y a la espera de la llegada del elenco nacional, que está clasificado ya para los octavos de final tras sus primeros tres éxitos en la capital provincial.
La decisión de que la entrada sea libre y gratuita para ver en acción a las voleibolistas del futuro ha sido más que acertada. Así, desde el pasado viernes gran parte de las gradas del estadio cubierto de Newell’s se ven colmadas jornada tras jornada y por ejemplo este domingo y ayer se debió habilitar el sector de populares debido al incesante ingresar de espectadores; en embas jornadas unas 3.000 personas dijeron presente.
El vóley en Rosario es uno de los deportes con más protagonistas. Desde niñas muy pequeñas hasta mujeres que despuntan la pasión ya pasada las cuatro décadas practican esta disciplina, que las une como grupo y consolida amistades más allá de una cancha. Esto genera el vóley…
Así, en el estadio rojinegro se ven día a día a pequeñas aprendiendo, a adolescentes gritando e hinchando por una selección que no es la albiceleste, a madres y padres acompañando… en fin, a la familia en un escenario deportivo disfrutando del deporte.
La historia continúa… El Mundial sigue… Y Rosario se consolida como ciudad capital del deporte. Esta vez con el vóley como el protagonista.
Una hincha tailandesa suelta en Rosario
Rosario es sede hasta el próximo domingo 27 de la XV edición del Campeonato Mundial de Voleibol femenino Sub 18. De las diez delegaciones que se encuentran alojadas en la ciudad hay representantes de Europa, Asia, América del Sur y América Central. Pero no sólo llegaron a la Cuna de la Bandera deportistas, sino hinchas. Y una se destaca por sobre el resto.
Desde el continente asiático arribó a Rosario Pancharhe Suvcharen, de 16 años, quien vino para ver a su país, Tailandia, jugar la Copa del Mundo.
Suvcharen se encuentra en Rosario desde febrero en el marco del programa de intercambio y regresará a Tailandia en enero de 2018.
Jugando al vóley en la escuela con sus amigas, Suvcharen no podía creer que su país viniera a Rosario para jugar el Mundial.
“Estoy emocionada por mi país”, dijo Suvcharen en diálogo con el Departamento de Prensa de la Copa del Mundo.
Lo que más le gusta de su selección es que “son todas buenas jugadoras y cuando juegan como equipo pueden ser realmente buenas”. Ella lo que espera es que su país “pueda ganar el resto de sus partidos aquí en Rosario, donde estoy desde febrero pasado”.
Suvcharen sabe un poco de español y cree que a lo largo de su estancia en Rosario lo mejorará.
En relación a Rosario, la joven tailandesa destaca la “variedad de los parques verdes” y sobre la “amabilidad de los rosarinos”. Ya agrega: “La gente es agradable y me gusta ir a los parques. Hacen que Rosario sea una ciudad hermosa”.
