A dos etapas del final del Rally Dakar 2016, Alejandro Patronelli se impuso ayer en el undécimo tramo de cuatriciclos que unió las ciudades de La Rioja con San Juan, y de no mediar inconvenientes definirá con su hermano Marcos, líder de la general, el título de esta edición.
Alejandro Patronelli se impuso con una ventaja de un minuto sobre el sudafricano Brian Baragwanath, mientras que Marcos Patronelli fue tercero, manteniendo el liderazgo a 18 segundos de su hermano en la clasificación general.
El ruso Sergei Karyakin completó el tramo en el cuarto puesto, superando al argentino Jeremías González Ferioli en una etapa que debió ser nuevamente acotada por las altas temperaturas que afectaban a los pilotos.
Los hermanos Patronelli, oriundos de la localidad bonaerense de Las Flores, acumulan cuatro títulos de Dakar (dos cada uno) y fueron los dominadores de los cuatriciclos entre 2010 y 2013.
Hoy, la penúltima fecha estará marcada por una intensísima etapa de 931 kilómetros, de los cuales 481 cronometrados, entre San Juan y Villa Carlos Paz.
En motos, el francés Antoine Méo (KTM) se llevó la victoria y ascendió al tercer escalón del podio, en una etapa donde el salteño Kevin Benavides fue sexto, pero se mantiene dentro del Top 5.
Después de dos etapas quedando siempre en el Top 3, el salteño Benavides volvió a sufrir con la navegación pero otra vez resultó ser el mejor de Honda y culminó sexto, a más de diez minutos de Méo. El argentino está quinto en la tabla general cuando quedan dos etapas para el final en la ciudad de Rosario.
La jornada estuvo marcada por el abandono del portugués Paulo Gonçalves tras una caída, que formaba parte de la terna de favoritos en motos. Lo cierto es que significó la segunda victoria de etapa para Méo, de 31 años y cinco veces campeón del mundo de enduro después de la lograda en la séptima fecha en Salta.
Méo, que se estrena este año en el Dakar, se impuso al final de los 431 kilómetros de la especial del día con un tiempo de 5h19m08s, con 18 segundos de ventaja sobre su compañero de equipo y líder de la general, el australiano Toby Price, y a 2m48s del chileno Pablo Quintanilla (Husqvarna).
“Es una locura, no me esperaba tanto. Es hasta increíble. He atrapado a Paulo (Gonçalves) antes de que se cayese, una pena para él porque incluso había conseguido seguir. Estoy satisfecho porque, para ser mi primer año, he conseguido encaramarme a la 3ª posición. Hoy (por ayer) la navegación era complicada y todos han cometido errores, así que me he aprovechado. Un día fantástico”, apuntó Méo.
Con dos etapas aún por delante antes de cruzar la meta final en Rosario, Price domina un podio ciento por ciento KTM. El australiano encabeza la general a 35m23s del eslovaco Stefan Svitko y a 43m46s de Méo.
Mientras tanto, el piloto qatarí Nasser Al-Attiyah (Mini) se llevó la victoria ayer en autos en la undécima etapa, en una jornada en la que el francés Stéphane Peterhansel (Peugeot) mantuvo el liderazo y ya acaricia su 12º título.
“Escuchamos bien cualquier ruido del motor y prestamos atención a todas las pérdidas de adherencia para no estropear ninguna pieza de la transmisión. Un problema mecánico podría dejarnos en la estacada. El rally se caracteriza por esos altibajos continuos. Basta un mal día en el Dakar y adiós, hasta el año que viene”, dijo un prudente Peterhansel tras llegar cuarto a la meta.
Al-Attiyah, ganador en 2015, se impuso al cabo de los 431 kilómetros cronometrados con un tiempo de 4h49m16s, adelantando a los dos ex pilotos del Mundial de rallies que participan por primera vez en el Dakar: el francés Sébastien Loeb (Peugeot), en 5m52s, y el finlandés Mikko Hirvonen (Mini), en 7m01s.
“Ha sido un día muy largo y con mucho calor. He ido tirando sin parar y estoy muy contento de haber ganado la etapa. El vehículo ha respondido a la perfección. Va a ser difícil, pero tengo que consolidar mi posición delante de Giniel (De Villiers). Ahora mismo tenemos 21 o 22 minutos de ventaja sobre él, así que la verdad es que sí, estoy muy contento”, comentó por su parte Al-Attiyah.
De esta forma, Peterhansel conserva cómodamente la cabeza de la general con 51m55s de margen sobre Al-Attiyah, a dos días de que finalice la carrera en Rosario. El sudafricano Giniel De Villiers (Toyota) completa el podio a 1h17m24s.
“¡Que se acabe ya!”, pidió Loeb tras la jornada. “No es que no me guste pero se hace largo. Y ahora ya no voy a buscar gran cosa, corro por correr, por lo que estoy bastante impaciente porque se acabe”, señaló.
Por otra parte, a bordo de su camión Iveco 4×4 Powerstar, el cordobés Federico Villagra no tuvo una etapa fácil y otra vez volvió a tener un retraso importante, que lo dejó noveno al ingresar a San Juan, aunque en la general sigue en zona de podio y es tercero, a casi dos horas del líder: el holandés Gerard de Rooy.
Al igual que los autos, los camiones pudieron disputar sin ningún problema los 431 kilómetros de la especial de la undécima etapa y el ganador resultó ser uno de los rusos de Kamaz: Eduard Nikolaev, por tercera vez en el Dakar 2016.
A pesar de estar lejos en la clasificación general (8°), Nikolaev volvió a demostrar el buen andar de los camiones rusos en la arena y con un tiempo de 5h31min37s se llevó la etapa 11.
Peter Versluis volvió a los primeros planos con el MAN y fue el escolta de ruso, quedando a 5m02s.
El Top 3 fue completado por un compatriota de Versluis y es Ton van Genugten, quien maneja el único Iveco frontal, perteneciente a la escuadra de Gerard de Rooy, quien se mantiene primero en la general después de haber sido sexto.