Esta vez hubo mucha puntualidad y por eso gran cantidad de gente se sorprendió y algunos se perdieron el preciso instante en el que se encendió el árbol luminoso de Pellegrini y Oroño. La fiesta comenzó temprano con familias que fueron llegando para ubicarse alrededor de la rotonda en la que está ubicada la estructura, mientras que algunos metros detrás se ubicó el escenario principal del evento.
Generalmente, tras horas de buena música en vivo, fiesta con espuma y baile, el acto clave del evento se realiza cerca de las 10 de la noche, cuando Papá Noel sube mediante una grúa y enciende el árbol, pero en este caso, todo se adelantó, quizás para cumplir con el itinerario de las autoridades que llegaron al encuentro para presentar el símbolo, que se suma a las guirnaldas luminosas en las zonas de Pichincha y el bulevar Oroño. Una multitud aplaudió y disfrutó el momento, pero otros apenas estaban llegando.
Entonces, mientras cientos se quedaron con sus reposeras disfrutando de la noche y escuchando música, muchos otros eligieron recorrer el paseo Pellegrini y elegir dónde comer para continuar la salida del sábado.
Este año el arbolito de Navidad lució renovado y con tres mil luces Led que proporcionan mayor luminiscencia y menor consumo, acompañando las políticas públicas de recambio a luminarias de esta tecnología en varios sectores de la ciudad.
La nueva edición del encendido del arbolito contaba con los recitales de Cool Confusion, QuarryMen, Alondra, Rey de Corazones y un coro de villancicos.
