Están todos invitados. Ya confirmaron su presencia Pino Solanas y Mauricio Macri, Aníbal Fernández y Jorge Lanata, Hugo Chávez y Barack Obama, Horacio Usandizaga y Eduardo López, y grandes personalidades del fútbol argentino como Diego Maradona, Lionel Messi, Martín Palermo, Guillermo Barros Schelotto, Miguel Ángel Russo, Sebastián Peratta, Julio Grondona, Carlos Bilardo y Julio César Falcioni.
¿Quién puede reunir a todos ellos y hacer amena la convivencia? Simple. “La Pelota no se Pincha”, el programa ícono de humor deportivo en Rosario llega a su fin y se despide a lo grande.
Después de siete años al aire en distintas radios de la ciudad, esta tarde de 15 a 17 por Del Plata Rosario 107.5, se escuchará la última risa.
Claro que los más afortunados también tendrán la chance de ver en vivo a Julián Bricco, las imitaciones de Patricio Muzzio, Edgardo Pento Masuelli, y Lisandro Maronna en el teatro de Empleados de Comercio (Corrientes al 400) a partir de las 21.30 y bajo la supervisión del productor César Frezzini, parte importante de este éxito junto a Diego Zian, operador de Del Plata.
Cuando allá por el 2005 surgió la idea de armar un programa deportivo “diferente”, los protagonistas de esta historia nunca imaginaron la repercusión que iban a tener en los oyentes de Rosario y alrededores.
Es que Rolando (en la voz de Masuelli), Mostaza Merlo (Muzzio) o Lewandowski (Maronna) se transformaron en la compañía cotidiana de todos aquellos que querían pasarla bien.
“Mañana (por hoy) me voy a sentir como el culo, crear un monstruo de estas características no fue fácil, no tiene explicación lo que ocurrió alrededor del programa, no lo esperábamos. Sabía que con gente de tanta capacidad no me podía ir mal. Uno debe saber dejar el programa antes que el programa lo deje a uno”, arrancó la charla Bricco. Y agregó: “Hay que saber irse, no puede ser que acá haya gente que haga lo mismo durante 20 años”.
Muzzio, a su vez, reconoció: “No vamos a caer de que se terminó, nos vamos a ir dando cuenta a medida que vayan pasando los días. Extrañar los llamados, tener las tardes libres va a ser muy raro”. Y Pento finalizó: “Todo tiene un ciclo, en el teatro medio me quebré porque en la vida personal me pasaron cosas duras, cuando la gente me aplaudió de pie no lo podés creer. Me hubiese gustado que mi mamá me vea en esa faceta”.
Uno de los motivos por los cuáles “La Pelota” se termina es el económico. La plaza rosarina está cada vez más compleja y el éxito masivo no alcanza para solventar el espacio.
“Rosario está limitada comercialmente y nosotros no somos políticamente correctos, cuando no hay guita se complica, ninguna agencia de publicidad de la ciudad nos llamó. Igualmente lo que las empresas nunca van a tener es a la gente. El reconocimiento de ellos, el llenar teatros, el que paguen una entrada para vernos en vivo, no lo van a tener nunca y eso les provoca cierta envidia. No puedo entender hasta el día de hoy cómo un programa como el nuestro no haya funcionado comercialmente”, subrayó Bricco quien hace 18 años que trabaja para Torneos y Competencias.
Ante esto, Maronna agregó: “Acá si no tenés un buen vendedor no vas a ningún lado, después la gente se queja de que el programa es malo. El rosarino no te acompaña en ninguna pauta, en Buenos Aires eso no pasa. El arte también es para publicitar”.
Siguiendo con esa línea, Pento comentó: “Al artista rosarino no se lo valora, la ciudad no apuesta. La vida se mueve por plata, todo se mueve por canje, mi hijo no come con una remera o una camisa”.
Cambiando de tema, tras el penúltimo show realizado el miércoles en Empleados de Comercio, el grupo de humoristas recibió una ovación de pie de la sala llena. Intentando explicar esas sensaciones, Maronna afirmó: “Lo que veo es un gran reconocimiento. Siento que este año es un cierre más, el año que viene lo voy a sentir, en marzo cuando debería empezar el programa no voy a saber que hacer y a dónde ir”. Y Pento sentenció: “No pensé nunca que la gente me saludase por la calle, del año 91 que hago radio, este programa fue más allá”.
Justamente, Pento encarnó durante estos años al personaje que más identifica al programa: Rolando.
“Cuando no está Rolando, al oyente le falta algo”, coincidieron Muzzio, Bricco y Maronna, pero, sin creérsela, Pento admitió: “Rolando es un personaje de la vida, las historias son 99 por ciento real, tuve una familia muy cómica, vengo de esas raíces. Mis viejos eran de hacer muchos papelones, las anécdotas que cuento son de como me crié”.
Este personaje como tantos otros surgió de la improvisación, de la genialidad de las cabezas de Pento, Maronna o Muzzio, y eso Bricco lo sabe: “Lo mejor que tiene la pelota es la improvisación. Es muy difícil hacer humor deportivo en Rosario, en estos años cambiamos un poco el pensamiento de los hinchas de Central y Newell’s. Al principio nos costó, nos comimos nuestras puteadas, pero lo fueron entendiendo. Acá hay mucho fundamentalismo, esto es ni más ni menos que un deporte”.
Por último, para que todos los “peloteros” no pierdan las esperanzas, el cuarteto subrayó: “Creo que vamos a volver, no en lo inmediato, pero en algún momento vamos a tener ganas de hacerlo de nuevo. No sabemos cuándo ni dónde, pero intuimos que vamos a volver”.
Y sí, es que “La Pelota no se Pincha” entró en el corazón de todos los rosarinos y a más de uno se le caerá un lagrimón cuando el famoso “Hoooooola Julián”, sea un “hasta siempre peloteros”.
Por la gente, por los aplausos
Durante estos siete años el grupo transitó un camino de rosas y espinas casi al mismo tiempo. Pero con cada risa de los oyentes, con cada aplauso, cualquier golpe dolía menos. Así lo sienten los integrantes de “La Pelota”. “Nosotros seguimos por el reconocimiento de la gente, nada más, desde Buenos Aires no fue lo mismo, le puse garra y seguimos un año más. No es lo mismo”, reconoció Muzzio .
Más allá de eso y para graficar el sentimiento de un programa exitoso, Pento finalizó: “Hay una frase de Maronna que en esta ciudad no perdona el éxito. No sé que más hay que hacer”.