Se lo propuso y lo consiguió. Con los dos goles que le convirtió a River el último domingo en el Gigante, Marco Ruben se transformó en el máximo artillero en la historia del profesionalismo de Rosario Central. El delantero de 35 años sumó 99 tantos en los 249 partidos que lleva jugados con la casaca auriazul en la primera división. Con esa cifra, superó a Waldino Aguirre, que ahora quedó segundo en el escalafón con sus 98 goles.
El pibe que soñaba con jugar en Central es el hombre que le sumó otro hito a su historia de amor con el elenco auriazul y que ahora entra en la historia y pasa al sitial de la leyenda.
“Conseguí lo más grande que me pudo pasar en mi vida futbolística y una de las cosas de las más importantes de la vida misma, ¿por qué no?; estoy feliz de quedar en la historia de este club”, dijo sobre su logro personal Ruben, definido por Kily González como el último ídolo vigente de Central. “Desde chiquito soñaba con jugar acá y llegar a esto es sólo para disfrutar; fue una tarde muy emocionante para mí, histórica, acompañado por los hinchas que me bancaron siempre y me dieron un cariño increíble”, confió el delantero sobre sus sensaciones post partido con River.
“Vengo viviendo situaciones lindas, relajado, compartiendo los momentos con gente que tira para adelante en mi club, y eso hace que disfrute mucho todo esto que está pasando”, relató el goleador. “¿Si me convertí en leyenda? No lo sé, es un sueño que se hizo realidad y quiero disfrutarlo a pleno con los que están cerca y con los hinchas”.
Más tarde, Ruben se refirió a las emociones que vivió cuando anotó su segundo gol ante River. “Sentí que valía todo, por eso me trepé al alambrado; fue un gesto de desahogo, quería sentir a la gente festejando bien cerca” contó. Y luego ironizó sobre la inusual situación: “Mis festejos generalmente son aburridos, todos parecidos, nunca me saco la camiseta ni nada de eso, así que quería que este fuera diferente, fue algo hermoso para mí”. Y también confió que charló con el juez, Pablo Echavarría, que podría haberle mostrado la segunda amarilla por el festejo: “No me acordé que estaba amonestado, pero hablé con el árbitro y él supo entender la situación”.
Luego, el 9 auriazul habló sobre el clima post partido en el vestuario de Central. “Tuvimos una charla muy linda en el vestuario con el grupo; son cosas íntimas y tienen que quedar en el grupo, pero Emiliano (Vecchio) tuvo un gesto muy lindo para mí y sus palabras fueron muy emotivas para todos nosotros, no me lo esperaba pero fue algo acorde al momento que estábamos viviendo después del partido”, apuntó Ruben, sin entrar en detalles sobre los dichos de Vecchio.
MR9 debutó en la primera auriazul el 25 de agosto de 2004, con 18 años. Fue por la tercera fecha del Torneo Apertura de ese año, jugando de visitante contra Quilmes. El partido culminó en empate sin goles y en este cotejo se produjo el retorno de Ángel Tulio Zof a la conducción técnica, tras haber anunciado su retiro en 1997. En este mismo torneo Ruben marcó su primer gol: fue ante Racing en Avellaneda, en un triunfo por 2 a 0 el 23 de octubre de 2004.
De los 99 goles anotados por MR9 con la camiseta de Central, 86 fueron a nivel nacional: 74 en Ligas y 12 en Copas. Y los 13 restantes en competencias internacionales: 11 por Libertadores y 2 en Sudamericana. Consiguió 59 de jugada, 24 de cabeza, y 16 de penal. Marcó 49 jugando en condición local, 42 de visitante, y los 8 restantes en cancha neutral.
La producción de Ruben en este segundo semestre de 2021 ha sido notable. Y esto más allá de que, afectado de Covid, se perdió 7 encuentros. Los números son irrefutables, hizo 15 goles en 20 partidos. Por el torneo disputó en forma consecutiva los últimos 17 juegos: Newell’s, Arsenal, Central Córdoba, Boca, Banfield, San Lorenzo, Talleres, Argentinos, Estudiantes, Patronato, Platense, Racing, Unión, Defensa y Justicia, Atlético Tucumán, Colón y River. Por la Copa Sudamericana participó en otros 3: la ida ante Táchira, de visitante; y los 2 duelos con Bragantino.
Además, Ruben se encuentra a un tanto de Aldo Pedro Poy en un particular escalafón, el de goleadores de cabeza en la primera de Central. El de Capitán Bermúdez suma 24, uno más que Edgardo Bauza que es tercero con 23, y uno menos que Poy, dueño de 25.
“Si tengo que elegir algunos de todos los goles que hice en Central, me quedo con dos. Uno es el primero que le marqué a Newell´s el día que ganamos 4 a 1 en el Gigante; y el otro es el que les hice en cancha de ellos en 2015”, recordó Ruben, dueño ahora de la marca de mayor goleador de la era profesional en Central.
EL FUTURO EN VEREMOS
“Todavía no decidí si voy a seguir jugando, es algo que tengo que pensar bien cuando termine el torneo; recién entonces tomaré una determinación”. Claro y contundente. Marco Ruben no definió aún si seguirá jugando o si le pondrá fin a su carrera profesional. El delantero de 35 años tiene contrato con los de Arroyito hasta el 31 de diciembre próximo.
Lo que también quedó a la vista es que la decisión que tome Ruben sobre su futuro estará ligada, principalmente, a cuestiones “personales y familiares”. Aunque también influirá, según confió el delantero, si Cristian González sigue al frente del primer equipo. La continuidad de Kily, aunque parece cerca de concretarse, también se encuentra en veremos. Y los referentes del plantel, con Ruben a la cabeza, respaldan al DT y esperan que desde la dirigencia auriazul llegue el guiño por la renovación del vínculo para el Kily.
“Estoy muy tranquilo, me gusta esto de plantear objetivos a corto plazo, se disfruta más; ya tendré tiempo de pensar si sigo jugando el año que viene, no me voy a apurar a definirlo”, advirtió MR9 para cerrar el tema.
QUEDÓ EN CAPILLA
Con la amarilla que recibió jugando ante River, Marco Ruben llegó a las cuatro acumuladas en el torneo. Por lo que el goleador tendrá que cuidarse la fecha que viene, cuando el sábado próximo Central visite a Lanús. Es que si MR9 es amonestado ante el granate, no podrá estar en cancha la fecha siguiente, la última del torneo, cuando los auriazules reciban a Huracán en Arroyito.
