Romero (5): Nada que hacer en los goles de Palavecino. Buena intervención en el arranque del complemento ante Álvarez. Flojo con los pies. Lanzó varios pases largos fuera del campo de juego.
Martínez (6): Se perdió un gol de cabeza conectando un centro en el segundo palo del área de River. Cumplió en lo defensivo y, como Blanco, pasó menos al ataque que en partidos anteriores.
Almada (6): Buena tarea. Ganó de arriba y de abajo en las inmediaciones del área auriazul. Además, un par de veces sorprendió y se animó a romper líneas con pelota al pie.
Ávila (6): Gran eficiencia en los mano a mano contra los delanteros de River. Falló varios pases largos, algo que habitualmente no sucede.
Blanco (7). Se proyectó menos que en otros partidos. Asistencia perfecta para el gol de cabeza de Ruben. También puso el pase al vacío a Vecchio en la acción que terminó en el gol de taco de Ruben.
Infantino (5): El despliegue de siempre. Pero algunas veces se pasó de entusiasta. Cometió demasiadas faltas, cinco.
Ojeda (3): Como en partidos anteriores, demasiado sólo para la tarea de recuperación. La única falta que cometió en el primer tiempo le costó una amarilla, y quedó condicionado. La segunda infracción, llegando tarde y golpeando a Palavecino, le costó la expulsión.
Lo Celso (6,5): Redondeó buen partido. Gran jugada para habilitar a Blanco en la antesala del gol de cabeza de Marco Ruben.
Vecchio (7,5): Mientras le dio el físico, fue clave. Jugadón para generar el gol de taco de Ruben. Con inteligencia, buscó espacios libres para recibir y generar juego. Llegó muy exigido en el cierre del primer tiempo a una definición mano a mano contra Armani.
Marinelli (5): Complicó al fondo de River con su velocidad. Pero a sus intervenciones, que no fueron muchas, les faltó mayor determinación.
Ruben (9): Tarde soñada por los dos golazos a River, de taco y de cabeza, para alcanzar el récord como máximo goleador del club en el profesionalismo.
Covea. No pudo tener la pelota. Ingresó en el peor momento de Central.
Tanlongo. Su ingreso busco equilibrar el medio tras la expulsión de Oejda.