El rosarino Leonardo Senatore, archivó por unas semanas los botines, y prepara el fin de año en familia. Tras 18 meses intensos, dedicados plenamente al rugby, es hora de tomarse un descanso. Pero siempre tiene un tiempo para recibir a los periodistas del sitio web supertry en su departamento de calle Salta. Porque Leo, sigue siendo el chico simple que conocimos en las juveniles de GER.
Por eso tras tanta actividad lo primero que señala es que “diciembre va a ser un mes muy especial, porque la única preocupación será mi familia, mis amigos, el club que extraño bastante, algo de gimnasio para mantenerme y estar con mi señora que prácticamente no me vio en todo el año”.
Senatore, comenzó el 2012 jugando para Toulon, club en el cual no pudo continuar por su deseo de jugar el Rugby Championship. Al regresar al país, se sumó en Sudáfrica a Los Pampas XV para jugar la Vodacom Cup por tercera vez. Luego vendrían la ventana internacional de junio en Argentina, la pretemporada en Pensacola, disputar el Rugby Championship y para cerrar el año la ventana internacional de noviembre en Europa.
—¿Cómo se soporta esa exigencia?
—Ponerse la camiseta de Los Pumas es algo sumamente especial. Vale la pena este esfuerzo y mucho más. Hay que estar física, técnica y psicológicamente siempre a la altura de las circunstancias para rendir de la mejor manera. Este descanso me vendrá muy bien”.
—¿Qué enseñanzas dejó el Rugby Championship?
—Fue un aprendizaje para todos, staff y jugadores. Si bien muchos decían que íbamos a perder por goleada, eso no ocurrió. Pero, además nos hemos ganado el respeto de todos. Richie McCaw le contó a Fernandez Lobbe, que cuando le hicimos el try en La Plata, les dijo a sus jugadores: muchachos a ponerse serios porque sino perdemos…!! Creo que jugando con ellos todos los años, vamos a crecer mucho. Ocurre que hoy tenemos 15 jugadores de gran nivel y el resto acompañamos, por eso sería lindo mantener este plantel para encarar mejor el año venidero.
—¿Qué dejó la gestión de Graham Henry?
—Siempre planteo una visión panorámica del juego. Nos señalaba situaciones en las cuales podíamos hacer tal o cual cosa, y finalmente hacíamos otra. Habló mucho de hacer las cosas básicas casi en el nivel de excelencia y para eso modificamos muchas cosas. Fue bueno tener su opinión, porque adaptamos nuestro sistema de juego a algunas cosas que el pedía. Lo más importante fue inculcar el concepto de ataque, pero sabiendo por qué se ataca.
—¿Cambió el juego de la tercera línea?
—La defensa es una de las premisas y sobre eso trabajo día a día para lograr un tackle más agresivo. Pero el cambio se ha dado en todos los jugadores, se está buscando una mayor predisposición al ataque. Pero como decía Graham, sin descuidar la defensa, algo que no manejamos bien en esta gira, pero insisto, eso también forma parte del aprendizaje. Este es el camino, y no deben importar tanto los resultados.
—¿Qué te pareció la rotación de jugadores?
Es necesaria y es necesario tener recambio, que roten todos. En mi caso estoy feliz por haber jugado y allí está el caso de Corcho que en mi concepto es el mejor ocho del mundo, pero fue de ala para dejarme su puesto. Eso habla de la solidaridad que hay en este equipo. El capitán de Los Pumas, con un liderazgo tremendo, no tuvo ningún problema en correrse de posición.
—¿Cuál es el balance del año?
—Fue bueno, más allá que queda esa sensación rara del partido con Irlanda. Pero en el año, se vieron a muchos jugadores nuevos jugando en el máximo nivel. Antes en junio, ganamos dos partidos, perdimos uno y sirvió para ver a gente que está jugando en Argentina. Pero además está el hecho de haber jugado doce partidos en el año. Dos veces contra Sudáfrica, Australia y Nueva Zelanda. Los encuentros en la Argentina, en el interior, se vivieron como una fiesta, fue muy importante para la difusión del rugby.