El número dos del Ministerio de Salud de Rusia explicó hoy que «en los últimos 10 días de diciembre» el Gobierno definirá si la vacuna Sputnik V es segura para los mayores de 60 años, un anuncio que coincidió con la promesa del presidente Vladimir Putin, de 68 años, de darse la primera dosis «en cuanto sea posible».
«Actualmente, el uso médico de rutina de la vacuna Sputnik V es posible con pacientes de entre 18 y 60 años. Para aumentar el límite de edad superior, los desarrolladores de la vacuna, el Centro Gamaleya del Ministerio de Salud de Rusia, está realizando ensayos clínicos adicionales con 100 voluntarios de más de 60 años que están mostrando buenos resultados preliminares», contó el número dos del Ministerio de Salud ruso, Alexey Kuznetsov.
«Ningún tema de seguridad se detectó con Sputnik V entre los voluntarios mayores. El desarrollador de la vacuna está analizando la información clínica y preparando un informe que será usado por el Ministerio de Salud para decidir sobre el uso de la vacuna contra la Covid-19 entre los grupos poblaciones de mayor edad. Se podría tomar esa decisión en los últimos 10 días de diciembre», agregó, citado por la agencia de noticias local Sputnik.
En paralelo, durante su tradicional conferencia de prensa anual, Putin explicó que aún no se vacunó porque todavía no es recomendado por los expertos estatales para las personas de su edad.
«Las vacunas que están siendo administradas hoy entre la población general son para personas de un cierto rango de edad, y todavía no para personas como yo», dijo el mandatario durante su rueda de prensa anual.
«Soy un ciudadano que cumple la ley. Escucho las recomendaciones de los especialistas y por tanto, aún no lo he hecho, pero está claro que lo haré en cuanto sea posible», agregó.
El mandatario defendió la eficacia de la vacuna Sputnik V al resaltar que es «segura y eficaz, con un nivel de protección de 96 a 97% según los expertos», y prometió que en 2021 Rusia tendrá millones de dosis listas para ser suministradas a la población, reportó la agencia de noticias AFP.
Frente a las preguntas de las prensa, Putin defendió la gestión de su Gobierno ante la pandemia, sostuvo que actuó «con dignidad» y «mejor que otros países del mundo», aunque reconoció que «ningún sistema (de salud) en el mundo estaba listo para afrontar» un problema de «semejante magnitud».
Rusia es el cuarto país del mundo con más casos, detrás de Estados Unidos, India y Brasil, aunque a más de 4 millones de contagios del gigante sudamericano.
Según el registro de la Universidad de Johns Hopkins, ya suma más de 2,7 millones de casos confirmados y 48.568 muertos, una cifra de fallecidos relativamente baja si se la compara con los tres países que encabezan el ranking.
La vacuna Sputnik V consta de dos dosis y, a diferencia de otras, solo requiere ser guardada a una temperatura de entre 2 y 8 grados, es decir, en una heladera normal.
Hace casi dos semanas Rusia comenzó a vacunar a los grupos de riesgo y los llamados trabajadores esenciales, mientras el Gobierno estimó que para fin de año podrán tener listas para administrar alrededor de dos millones de dosis.
El Gobierno anunció que la población en Rusia será vacunada de manera gratuita y que cada dosis costará para el exterior menos de 10 dólares.
Rusia ya selló acuerdos para exportar o producir en el exterior más de 400 millones de dosis, entre ellas 25 millones con el Gobierno argentino, que esta semana envió una delegación a Moscú.