A una semana de la reanudación del torneo de la B Nacional, Miguel Ángel Russo analizó el presente futbolístico canalla. Para ello, recordó lo transitado por el equipo durante el primer semestre.
Además, Russo, rescató la fortaleza anímica del grupo. Y marcó la importancia de contar con un plantel muy competitivo. En este sentido, el técnico se mostró entusiasmado con el nivel que están mostrando los jugadores. En particular, los que participaron poco en la primera parte del campeonato.
—¿A qué le apuntan en este tramo final de la pretemporada?
—La idea es lograr que el plantel alcance la mayor competitividad posible. Que los que terminaron jugando mantengan el nivel, y que los que venían afuera por distintos motivos, levanten. Hay una competencia muy sana y todos saben que va a jugar el que esté mejor. Tenemos una responsabilidad ineludible, la de mantenernos en zona de ascenso. Ojalá siempre tenga que dudar entre dos jugadores para cubrir un lugar, antes que no tener opciones para hacerlo.
—Pensando en conseguir el objetivo, ¿cómo ves al plantel desde lo sicológico?
—En ese sentido estamos bien. Perseguimos un objetivo único y primordial. Y sabemos que esto será partido tras partido. Cuando hablamos de 20 partidos sabemos que será uno más exigente que el otro. Antes de empezar el torneo nuestro principal rival era Central, y hoy sigue siendo igual. Lo siento así. Jugando tanto de local, como de visitante, es muy difícil que nos salgan a atacar. Siempre salimos a proponer nosotros, y eso no nos cambia nada. Hay que mantener la humildad, respetar a todos, pero saber muy bien que somos fuertes. Ya hemos demostrado que somos fuertes. Siempre valoré a este grupo desde el aspecto mental. Retrocedo en el tiempo, y puedo decir que no cualquiera supera la situación que hemos superado nosotros. Y lo hicimos con algo que considero muy importante, con juego. Salimos adelante con nuestra idea futbolística.
—Después de lo que superaron, ¿pensás que están preparados par sortear cualquier tormenta?
—Primero, creo que nos ganamos un respeto. El que se sabe levantar por sí sólo, se gana un respeto. Pero sabemos que con es no alcanza. Dificultades van a aparecer. No vamos a ganar los 20 partidos que quedan por delante. A medida que pasen las fechas, se irá achicando el margen de error. Lo sabemos, y tendremos que llevarlo de la mejor manera posible. En búsqueda de ese objetivo, aislarnos en la tranquilidad que brinda este predio de Arroyo Seco, ayuda bastante.
—¿Cómo están hoy como equipo respecto del nivel que tenían cuando se interrumpió el torneo?
—Cuando hay un parate, todo cuesta. Pero hoy tenemos bases más sólidas que al principio del torneo. Eso es indudable.
—¿Qué importancia le das a esto de trabajar con un equipo que sale casi de memoria?
—Es bueno. Pero eso no quiere decir que me olvido de los que jugaron menos. En particular cuando los veo hoy a todos en buen nivel. Cuanto más eleven el nivel los jugadores, mayores variantes tendrá el técnico.
—Potencialmente, la sensación es que Central tiene una ventaja sobre el resto de los competidores por el ascenso, la riqueza de su plantel.
—Esa fue la idea desde el principio. Uno quiere contar con un plantel lo más competitivo posible. Eso sería lo ideal. Y nosotros trabajamos para eso. Hay un nivel muy competitivo en el plantel, y eso es muy importante para el entrenador.
—Como cabeza de grupo, ¿qué te parece que tiene hoy Central como para avalar sus chances de lograr el objetivo?
—Que creemos y estamos convencidos de lo que hacemos. Esa es la idea madre.
