El entrenador de Rosario Central, Miguel Angel Russo, estimó que Juan Román Riquelme «volverá a jugar en Argentina», pero desechó la posibilidad de que se sume al equipo que dirige, y al respecto sostuvo que esa «fue solamente una expresión de deseos de su amigo Marcelo Delgado».
«Riquelme va a volver a jugar en Argentina, según mi impresión. Ojalá que lo haga», manifestó Russo en una entrevista con el programa radial Deportivo Télam.
«Pero de lo que estoy tranquilo es que la situación no nos sobrepasó cuando se dijo que venía a Central. Esa fue solamente una expresión de deseos del `Chelo` Delgado, que es su amigo», refirió.
El ex técnico del Boca campeón de la Copa Libertadores 2007 que tenía como estandarte futbolístico a Riquelme aseguró que ahora volvió a Central porque priorizó «la familia, el país, el club, la ciudad y que firmé un contrato por dos años».
«Lo que pasa es que en este país los entrenadores corremos con desventaja, porque generalmente firmamos contratos por un año, mientras que los jugadores lo hacen por dos o más», cuestionó.
«Y en cuanto al recambio de entrenadores que se está produciendo, no es bueno que se den pasos tan rápidos. Es que las urgencias son malas consejeras, porque igual de ligero te podés caer. Y cuando eso pasa, quedás marginado porque no te fue bien de entrada», sentenció.
A punto de iniciar un nuevo ciclo en el club rosarino que tiene como secretario técnico al «Pejerrey» Gonzalo Belloso, el ex entrenador de Lanús, Estudiantes (con ambos logró ascensos a primera), Universidad de Chile y Salamanca, de España, juzgó que esa función «debe ser para gente especializada, como ocurre en Europa».
«Además a mí no me gustan los managers que pretenden ser entrenadores. Por ejemplo, yo quiero ser director técnico y no otra cosa», remarcó.
«El entrenador debe atravesar una etapa de experimentación, otra de elaboración y luego la de desarrollo. Hay que prepararse, porque uno se convierte en técnico después de un tiempo, luego de atravesar experiencias buenas y también malas», analizó.
Russo juzgó al respecto que por eso «la presencia del manager debe aliviarle el trabajo al entrenador, y ambos deben estar siempre conectados entre sí».
«El prestigio de un técnico se va ganando todos los días. Hay algunos que aceptan otras cosas, pero yo siempre mantengo el espíritu para crecer, como cuando empecé en Lanús con solamente seis jugadores a mi disposición. El día que no piense así, me dedicaré a otra cosa», destacó.
«Ahora voy a dirigir en la B Nacional a un equipo que tendrá toda la exigencia, porque será el rival a vencer por todos. El ascenso cambió mucho en los últimos tiempos, ya que hay más dinero y mejor nivel. Lo que no me gusta es no poder llevar hinchas de visitante», puntualizó.
Finalmente Russo indicó que están «esperando la habilitación de algunos refuerzos (Mauricio Caranta, Hernán Encina, Diego Lagos, Alejandro Gagliardi, los tres últimos de Instituto), pero el caso más complicado es el del uruguayo Nicolás Freitas (25 años, de Peñarol), por el tema del contrato en dólares».