Desde Sadop Rosario, el gremio de los docentes privados, cuestionaron al gobierno provincial por resolver «unilateralmente, sin consulta previa y sin tener en cuenta los procesos pedagógicos realizados por los equipos docentes de las escuelas» la modificación «del régimen de evaluación del nivel secundario».
«Una vez más el Ministerio de Educación resuelve unilateralmente, sin consulta previa y sin tener en cuenta los procesos pedagógicos realizados por los equipos docentes de las escuelas. En esta oportunidad, avanzó en la modificación del régimen de evaluación del nivel secundario y dispuso sobre los exámenes de finalización de estudios y de espacios curriculares pendientes», expresó el gremio que conduce Martín Lucero.
«Para la docencia del nivel secundario esto implicará en una instancia inmediata una sobrecarga en las tareas que deberá realizar porque en simultáneo deberá realizar el acompañamiento pedagógico del alumnado en los espacios curriculares que dicta en cada escuela y en paralelo un proceso evaluativo de estudiantes con materias pendientes. Todo ello durante los meses de mayo y junio», remarcaron sobre las disposiciones tomadas por la cartera de Educación santafesina para el nivel medio.
«Con las resoluciones 223 y 224 y la circular 13 se ha transformado las modalidades de acreditación y promoción de saberes en el nivel secundario sin argumentación de los criterios para la reforma de los sistemas de evaluación. Tampoco se informaron los indicadores que se tuvieron en cuenta para este cambio sustancial que entre otras cosas, permite que el docente que evalúa el espacio curricular no necesariamente será el titular de ese espacio», se expresó mediante un comunicado.
«Por otro lado, las disposiciones dejan sin atender las particularidades de la modalidad adultos en el nivel secundario con una organización y calendario cuatrimestrales», indicó y amplió: «En un contexto de una institucionalidad escolar sostenida por los docentes con recursos y equipamiento propio, las autoridades ministeriales deciden soslayar el impacto de estas medidas en las comunidades educativas».
«A su vez infiere en una terrible contradicción cuando, en nombre de la calidad educativa manifiesta apoyar el sostenimiento del sistema educativo desde la virtualidad o repartiendo cuadernillos y por el otro permite que los alumnos y alumnas que a marzo habían repetido el año por tener 4 materias pendientes, tendrán la oportunidad de no hacerlo si aprueban los itinerarios evaluativos de dos espacios curriculares. Con estas nuevas disposiciones, aprobando las instancias evaluativas quedaran habilitados para promover al curso siguiente, siendo matriculados en las divisiones correspondientes, con el compromiso de realizar trabajo prácticos del primer trimestre», finalizó.