Un joven de 25 años fue asesinado de un disparo por la espalda anteanoche en inmediaciones de la vivienda de su novia tras ser emboscado por el ex de la chica, en Villa Gobernador Gálvez, según voceros policiales. Los pesquisas indicaron que el autor del crimen está identificado, pero, anoche, continuaba prófugo de la Justicia.
El caso se conoció anteanoche minutos después de las 20 cuando Orlando Silvio O., de 25 años, llegaba a su casa y se encontró a un joven desvanecido en el pasillo de la cuadra de pasaje 7 al 2700, de Villa Gobernador Gálvez. Orlando pidió auxilio al Sies y los médicos intentaron reanimar a la víctima, identificada como Jonathan Ezequiel Cina, de 25 años, quien presentaba un disparo por la espalda. El herido fue trasladado a la guardia del hospital Anselmo Gamen desde donde anunciaron que pasadas las 21 murió como consecuencia de las heridas recibidas, describieron las fuentes relacionadas al caso.
De acuerdo con la investigación, tras recolectar una serie de declaraciones, una joven, quien luego tuvo que ser hospitalizada, contó que Cina era su pareja desde hacía unos meses y que lo atacaron en inmediaciones de su vivienda, jurisdicción de la subcomisaría 26ª.
Los pesquisas describieron que tras las primeras medidas pudieron identificar al homicida como la ex pareja de la joven, el cual era intensamente buscado por la Policía. A su vez, también está sospechado de ser el autor de la balacera que su ex novia sufrió dos meses atrás, aunque el caso fue presentado como un robo por la chica.
Voceros judiciales dijeron que esta versión es una de las hipótesis que siguen y que la víctima había salido de la Unidad 6 ese mismo día a la mañana, donde cumplía una condena por robo.
El caso quedó a cargo del fiscal de la Unidad de Homicidios Dolosos Luis Schiappa Pietra.
Femicidio o suicidio
Un disparo en el pecho terminó anteanoche con la vida de Estefanía Daiana Armanino, una joven de 24 años que falleció dentro de su casa de Rouillón al 400 bis de barrio Ludueña. La Policía llegó al lugar tras un llamado al 911 que alertaba sobre una persona herida de arma de fuego cuando ya estaba muerta. Su concubino entregó un revólver calibre 38 envuelto con un trapo y dijo que fue un suicidio pero quedó demorado por orden del fiscal Luis Schiappa Pietra. Fuentes policiales informaron que una vez que llegaron al domicilio escucharon a una persona gritar a viva voz: “Pasen, pasen arriba en la habitación está herida la chica”, pero que al subir la hallaron sin vida. Su concubino, identificado como Walter Santos G., de 30 años, quedó en la comisaría del barrio hasta que se aclare si se trató de un homicidio o si la joven se quitó la vida, como dijo el hombre, en tanto su padres corrieron la misma suerte.
