La causa judicial que investiga la catástrofe ocurrida el pasado 6 de agosto en Salta 2141 cambió nuevamente de juez. La firma Litoral Gas SA había planteado una recusación por “preguzgamiento” contra el magistrado a cargo, Javier Beltramone, al que luego se sumó una presentación en el mismo sentido de la defensa de los administradores del complejo, y aunque ambos resultaron rechazados por el juez, la sala IV de la Cámara Penal, con dos votos a favor y uno en disidencia, resolvió el apartamiento. Esta decisión implica la intervención de un tercer magistrado en la investigación, porque la causa ya había cambiado de magistrado al pasar del fuero Correccional al Penal. Ahora la jueza Irma Bilotta deberá empaparse del expediente, que ya lleva dos meses de actuaciones y acumula varios cuerpos; y además, según fuentes judiciales, es probable que se produzca la reiteración de algunas medidas probatorias que fueron efectivizadas después de los pedidos de apartar a Beltramone. Y aunque la fiscal que entiende en el caso, Graciela Argüelles, refirió que la investigación va a seguir por los mismos carriles que hasta ahora, la noticia cayó muy mal entre familiares de las víctimas (ver aparte) que hoy marcharán a Tribunales.
Los diez día posteriores a la explosión, la causa tramitó en el juzgado Correccional N° 7, a cargo de Juan Carlos Curto, quien luego de realizar las primeras medidas, como la protección de elementos de prueba, decidió apartarse de la causa, ya que el delito con el que la caratuló, estrago doloso agravado, tiene una pena máxima de de 5 años, lo que excedía su competencia. Así remitió el expediente al Juzgado de Instrucción N°9, cargo de Beltramone.
Posteriormente Beltramone liberó al gasista, decidió que los peritajes sobre las partes de las instalaciones extraídas del edificio los hiciera una firma privada –GIE que actualmente está terminando la tarea en Mar del Plata–, citó a testimonial a todos los involucrados, y llamó a indagatoria a responsables de Litoral Gas y de la administración del edificio. Conocidas estas medidas, los abogados de la privatizada primero y los de la administradora después, plantearon la recusación del juez por “preopinar” en los medios. Beltramone rechazó y apelada la revisión de la negativa del juez quedó en manos de la sala IV que con dos votos a favor y uno es disidencia apartó al magistrado de la causa. Ahora el expediente recaerá en Bilotta, quien mantiene un acotado trato con la prensa.
La recusación
Según el planteo de las partes el juez brindó a diferentes medios declaraciones sobre la causa donde citan frases que a su entender generan temor de parcialidad. Ellas son “la responsabilidad legal de Litoral Gas es clara”, “le estoy dando una primicia”. En alusión a los responsables de la administración del consorcio dijo que hay una “anomalía grave que amerita el llamado a recibirle declaración indagatoria a inspectores que protagonizaron hechos anteriores y no inmediatos al motivante de la causa. Los camaristas Daniel Acosta y Rubén Jukic sostuvieron que el juez, al desechar la resolución, refiere que no se acompañó soporte magnético que demuestre lo que dijo e introduce la posibilidad de que se trate de una interpretación periodística. Aunque según ambos camaristas en un CD remitido por Canal 5 se ve y se escucha claramente al juez, aun sin que medie pregunta clara decir que “la responsabilidad de Litoral Gas es clara, porque es una empresa que está operando por un servicio derivado de una privatización”, agregando casi de inmediato ante el requerimiento periodístico que no puede aportar mayores precisiones, ya que todo lo que signifique opinar sobre la responsabilidad sería pre opinar” en una evidente toma de conciencia de que lo anterior había sido un exceso, sostienen. A lo que suman que el resto de las frases fueron verificadas en un soporte digital que adjuntó una de las partes de una entrevista radial.
Voto en disidencia
La postura de los camaristas Jukic y Acosta no fue compartida por su par Carlos Carbone quien votó en disidencia. El magistrado sostuvo que si bien resultan inadecuadas en el contexto las declaraciones de Beltramone debe tenerse presente el marco instructorio donde la oficiosidad es la nota, donde el juez tiene el deber de investigar con solo la compañía fiscal y sentir que debe dar cuenta de sus actos a través de la prensa máxime en un asunto tan grave y trágico. “Esta dualidad seguramente le jugó en contra al instructor, aunque de buena fe, sensibilizado y viéndose de algún modo obligado a explicar prácticamente cada uno de los actos procesales importantes de la causa como estandarte de transparencia, generando intervenciones desafortunadas en dicho trance. Sin embargo, la prueba traída, no refleja certeramente que se justifique ese temor de parcialidad alegado”, refiere el fallo.
Carbone entiende que es necesario analizar las declaraciones a la luz del accionar jurisdiccional y que del expediente surge clara la imparcialidad del instructor al punto que desestimó la recusación de los peritos privados designados pese a alegarse por la Fiscalía parcialidad con la empresa de gas.
El voto mayoritario sostuvo que las expresiones cuestionadas si hubieran surgido de boca de un periodista pueden encuadrarse en el “periodismo de opinión” pero en cabeza de un juez “deviene reprochable”. Y agregan que hoy no puede sostenerse no dar a publicidad resoluciones, pero ello no genera la obligación de hacer una suerte de minuto a minuto de la información acopiada.
“Una vergüenza, cada día peor”
La noticia del apartamiento del juez Javier Beltramone causó un profundo malestar entre los familiares de las víctimas de Salta 2141. “Es una vergüenza, ya no sabemos qué hacer, estamos desgarrados, cada día peor…”, dijo, afligida y con la voz entrecortada, Nora Giraudo, mamá de Maximiliano Vesco. Lo mismo expresó Claudia Vaio, madre de Santiago Laguía, cuyo cuerpo fue uno de los dos últimos en ser rescatado: “Tendrían que tener vergüenza. Es el tercer juez en dos meses. No les importa nada nuestro desgarro. ¿Qué pretenden ahora? Espero que esta señora (por la jueza Irma Bilotta) tenga hijos y nos entienda. Seremos su sombra hasta que termine el juicio. No tengo dudas”.
Un grupo de familiares habían pensado en reunirse hoy a las 11 hasta los Tribunales provinciales para entregar una nota a los integrantes de la Cámara en apoyo al ahora apartado magistrado. “Como sabían de esto, se adelantaron. Es una vergüenza”, se enfureció Giraudo. “Parece que fuera a propósito para seguir dilatando la causa, porque ahora, hasta que la jueza, hasta que se ponga en tema, ¿cuánto tiempo va a pasar?”.
En tanto, Vaio hizo conocer su desconcierto por el apartamiento de Beltramone a través de su cuenta de Facebook y le apuntó directamente a la nueva jueza: “Embarrar la cancha, así se llama esto. Pero que no jueguen porque no saben lo que somos capaces de hacer. Señora jueza, más vale que haga las cosas como corresponde porque no vamos a perdonarle un solo error. Y si quiere tomarlo como una amenaza, me importa muy poco. Soy inimputable. Enterré a mi hijo por culpa de esos asesinos y usted lo sabe. Con esto no se jode. Ojo!”.