La Cámara Baja de la Legislatura provincial aprobó por unanimidad la expropiación del terreno del calle Salta 2141, donde se erigía la edificación que fue escenario de la mayor tragedia en la historia de Rosario. La iniciativa propone la creación de un centro cultural y un memorial en homenaje a las 22 víctimas de la explosión.
La intención de gobernación es convertir el lugar donde se levantaban las tres torres demolidas en un espacio dedicado al arte y a la formación que estará bajo la órbita de la Secretaría de Cultura, así como también un ámbito de memoria y recuerdo de las víctimas. El gobernador Miguel Lifschitz tomó la resolución tras una serie de encuentros con familiares de las personas fallecidas.
“Con este proyecto estamos atemperando el profundo dolor que causó a los familiares de las víctimas de esta tragedia, sin perjuicio de la investigación judicial en marcha que determinará las reales responsabilidad penales por las que se produjo este trágico hecho que conmovió a Rosario en particular y a todos los santafesinos y argentinos en general”, resumió el jefe del bloque de diputados socialistas, Rubén Galassi.
El 6 de agosto de 2013, a las 9.38 Rosario vivió su peor tragedia cuando, por una fuga de gas, explotó el edificio de Salta 2141. El siniestro se llevó la vida de 22 personas y hubo más de 60 heridos. Cuatro años pasaron de aquel fatídico día que marcó la historia de cientos de familias. El juicio oral y público aún no tiene fecha.
El ex ministro recordó: “No sólo el 6 de agosto sino los días sucesivos fueron de mucha angustia y congoja; una verdadera tragedia que golpeó a nuestra sociedad».
Y agregó: “Creemos que de esta manera estamos cerrando una etapa, estableciendo allí un sitio de memoria, pero al mismo tiempo destinar parte de ese espacio a un edificio del Ministerio de Innovación y Cultura. Queremos que sea un lugar de memoria, recordación, pero también un espacio que recupere vida a través de espacios vinculados con la creación, el arte y la música”, aseguró Galassi.
Desde la gobernación resaltaron que este perfil de uso del predio busca garantizar que el terreno se convierta en un sitio público y no en un desarrollo privado.
Ahora el proyecto deberá ser aprobado por el Senado para convertirse en ley.
