Un gendarme y un policía, ambos de 43 años, quedaron en prisión preventiva en el marco de una investigación en la que se les endilgó haber privado ilegítimamente de la libertad a un hombre al que además amenazaron en San José del Rincón (departamento La Capital). De acuerdo con la atribución delictiva, durante el amedrentamiento le aplicaron apremios con armas de fuego a la víctima para exigirle información relacionada a un robo.
La medida cautelar para el integrante de la fuerza de seguridad nacional, cuyas iniciales son D.O.S, fue impuesta por el juez Jorge Patrizi, en una audiencia desarrollada en la ciudad de Santa Fe. Por otro lado, la privación de la libertad del otro imputado, de iniciales UMB, fue ordenada por la jueza Celeste Minniti en otra audiencia realizada en la capital provincial.
La investigación está a cargo del fiscal Ezequiel Hernández, quien se desempeña en la Sección Violencia y Corrupción Institucional la Unidad Fiscal Especial de Delitos Complejos de la Fiscalía Regional 1.
Comisaría 14
En cuanto al policía, el funcionario del MPA señaló que “la jueza que le impuso la medida cautelar hizo hincapié en que se trató de ‘un hecho extremadamente violento’”.
“La magistrada también contempló el riesgo que implicaba que el imputado haya trabajado hasta el momento de los hechos en la comisaría número 14, localizada en Rincón, en la que se referencia el hombre intimidado”, sostuvo. “Si el investigado hubiese recuperado su libertad, sus compañeros hubieran tenido que intervenir ante cualquier inconveniente entre la víctima y él”, explicó el fiscal.
En una camioneta
Hernández indicó que “alrededor de las 22:00 del sábado 28 de octubre de este año, el gendarme -quien estaba vestido de civil y desde hacía tiempo cumplía tareas pasivas- y el policía -uniformado-, ingresaron a una casa de Rincón”. En tal sentido, planteó que “entraron sin observar las formalidades prescriptas por la ley”.
Relató que “luego de revisar el domicilio en búsqueda de bienes que el gendarme manifestaba que le habían sido sustraídos, ambos imputados privaron ilegalmente de la libertad, al menos por dos horas, a un hombre de 23 años que vive en el inmueble”. Al respecto, puntualizó que “el agente policial actuó con abuso de sus funciones públicas”.
El fiscal expuso que “mediante intimidación y engaños, lograron que la víctima subiera a una camioneta que le pertenece al gendarme”, y agregó que “le dijeron que se dirigirían a la comisaría número 14, pero no tenían previsto ir allí”.
En tanto, el funcionario del MPA subrayó que “dentro del vehículo, los agentes públicos ejercieron coacción psicológica contra el hombre al que habían instado a acompañarlos”. Según afirmó, “mientras lo amenazaban con dos armas de fuego, le aseguraban que iban a matarlo de un tiro en la cabeza y arrojarlo al río”.
“La coacción fue desplegada con el objetivo de que la víctima aportara datos sobre el robo sufrido por el gendarme”, aseveró Hernández. “Atemorizado, el hombre privado de su libertad en la camioneta les marcó a los atacantes diferentes domicilios en los que podía estar una persona involucrada en el delito contra la propiedad”, especificó. “Los coautores fueron hasta esos lugares e ingresaron sin las formalidades requeridas”, agregó.
“Finalmente, la víctima fue devuelta a su casa y, al llegar, el gendarme y el policía volvieron a entrar de forma ilegítima”, resaltó el fiscal. “Frente a testigos, el imputado de iniciales UMB amedrentó nuevamente al hombre que sufrió los ilícitos”, apuntó.
Arma de fuego
Hernández mencionó que “el policía además es investigado por la tenencia ilegítima de una escopeta de un tubo cañón, calibre 16”. Detalló que “más allá de que el arma está en un mal estado de conservación que impacta en su eficiencia, es apta para efectuar disparos”.
Delitos
A los dos imputados se les atribuyó la coautoría de privación ilegítima de la libertad, apremios ilegales y allanamiento ilegal. Por su parte, al policía también se le endilgó la autoría de tenencia ilegítima de arma de fuego de uso civil.