Un oficial principal de la Policía Federal, que se desempeñaba como jefe de calle de la brigada de la Delegación San Juan, fue detenido en las últimas horas por la presunta tenencia y distribución de pornografía infantil.
Fuentes judiciales informaron que se trata de Matías Carrizo, quien además es el hijo del jefe de la agencia Regional Cuyo de PFA. La investigación está a cargo del fiscal Roberto Mallea, de la Unidad Fiscal de Investigaciones del Centro de Abordaje Integral de Niños, Niñas y Adolescentes Víctimas (ANIVI), quien el fin de semana solicitó la captura de Carrizo.
La posible imputación contra el efectivo es por el presunto delito de «distribución de representaciones sexuales de menores de 18 años, doblemente agravada por la edad de las víctimas y la condición de funcionario público del sospechoso», según voceros judiciales.
La causa se inició la semana pasada a raíz de un informe enviado por la Unidad Fiscal Especializada de Delito y Contravención Informática, dependiente del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad de Buenos Aires, que detectó la supuesta actividad ilegal por tráfico de pornografía infantil que provenían de un domicilio en San Juan.
Las actuaciones fueron giradas a la UFI del Centro ANIVI y los investigadores sanjuaninos localizaron esa vivienda e identificaron a su propietario. Al allanar esa casa se sorprendieron, ya que esa persona era el oficial principal Carrizo, jefe de calle de la brigada de la Policía Federal de San Juan.
El fiscal Mallea cuenta con indicios de los primeros informes que comprometerían al policía o dan cuenta que la actividad del tráfico de material prohibido supuestamente salió de una de sus computadoras o teléfonos celulares, según informó el diario Tiempo de San Juan.
Ese fundamento presentó el trabajador judicial para pedir al juez de garantías Federico Rodríguez la detención del policía federal y el allanamiento en su domicilio para el secuestro de elementos informáticos.
La orden de captura se libró el fin de semana, al tiempo que el uniformado se presentó el domingo de manera voluntaria en la fiscalía y se entregó. Efectivos de la Policía sanjuanina con personal de la UFI del Centro ANIVI realizaron el procedimiento en la casa de Carrizo en la zona de Pie de Palo en Caucete, donde secuestraron computadoras, teléfonos celulares y soportes informáticos para su análisis.
Actualmente el policía se encuentra detenido en una sede de la fuerza de esa provincia y la audiencia de formalización se realizará en las próximas horas con la presencia del fiscal Mallea y el juez Rodríguez.