La rotura de una cañería que conduce cianuro en la mina de oro Veladero, en la cordillera sanjuanina, causó alarma entre los habitantes del departamento de Jáchal, ubicado a unos 170 kilómetros al norte de la capital provincial, según afirmaron los trabajadores del emprendimiento a través de las redes sociales y reconocieron los representantes de la empresa concesionaria, la canadiense Barrick Gold.
La denuncia provocó que unas 300 personas se autoconvocaran anteanoche frente a las puertas del municipio de Jáchal, donde el intendente Jorge Barifusa afirmó que los técnicos estimaban que “no se había producido contaminación del río Jáchal”, tal como se estimó en un principio.
No obstante, los vecinos reunidos en asamblea acordaron conformar una comisión para que reclame y supervise la producción de análisis de las aguas por parte de la Universidad Nacional de San Juan.
Por su parte, la empresa Barrick Gold emitió ayer un comunicado en el que reconoce que “Veladero reportó un incidente derivado de la rotura de una cañería que conduce solución cianurada, desde la planta de procesos hacia el valle de lixiviación”, pero aseguró que “no hubo contaminación en los ríos que corren en la cuenca del río Jáchal”.
La empresa indicó que frente al problema “se procedió a actuar de acuerdo al Plan de Manejo de Emergencias de la Mina Veladero y se tomaron todas las medidas para dar solución a la contingencia ocurrida”. También sostuvo que “la solución cianurada pasó a ser derivada desde la pileta de contingencia al valle de lixiviación”.
“Queremos dejar absolutamente claro que sólo hubo daños materiales en una cañería sin verse afectada la salud de los trabajadores y se están investigando las causas del incidente y monitoreando todas las variables ambientales en la zona”, apuntó la compañía.
En diálogo con Radio Télam, el presidente del Concejo Deliberante de Jáchal, Mario Luna, dijo que la empresa les aseguró que el derrame se había producido dentro del dique de lixiviación “y que el líquido cianurado no había llegado al río”.
La compañía minera canadiense señaló a las autoridades que había logrado bombear el líquido derramado y reparar la cañería dañada, no obstante Luna dijo que esperarán el informe final de la Policía Ambiental de la provincia para ver “si coincide con la versión de la empresa”.
“El municipio ha tomado muestras del río para hacer un análisis del agua”, indicó el concejal, quien aclaró que la localidad de Jáchal se encuentra a 120 kilómetros aguas abajo de la mina Veladero, que se ubicada en el departamento de Iglesias.
Jáchal cuenta con una población de 22 mil habitantes, Iglesias con cerca de 9 mil, en tanto que en la mina trabajan más de 3 mil personas.
Luna dijo que del total de los pobladores de Jáchal, unos 10 mil se proveen de agua de una napa subterránea y el resto de pozos domiciliarios y en todos los casos “se requiere realizar un seguimiento para detectar posibles contaminaciones”.
El municipio de Jáchal no tiene laboratorio propio y hace los análisis, cada vez que lo requiere, a través de la Universidad de San Juan, tal como será en este caso.
