En medio de muestras de dolor, cientos de personas pasaron durante la noche por la Catedral de la ciudad de San Luis, donde son veladas las ocho víctimas fatales del accidente protagonizado el miércoles por un tren y un micro escolar en las inmediaciones de la localidad puntana de Zanjitas.
Los féretros conteniendo los restos de las seis niñas y las dos docentes fueron alineados frente al altar del templo mayor.
La conmoción por la tragedia ocurrida en un paso a nivel de la ruta provincial nº 3, a unos 60 kilómetros al sur de la capital puntana, fue muy grande en la población de San Luis y motivó una gran movilización de personas hacia el velatorio, para acompañar a los familiares de las víctimas en tan doloroso momento.
En la mañana de este jueves permanecían en la Catedral cientos de familiares y allegados para el último adiós a las víctimas.
Para las 11 está prevista una misa de cuerpo presente, que oficiará el obispo diocesano de San Luis, monseñor Pedro Daniel Martínez, para pedir por el eterno descanso de los fallecidos en la tragedia, como así también por la recuperación de los heridos.
En lo que calificó como “la peor tragedia de San Luis”, el gobernador Alberto Rodríguez Saá dispuso dos días de duelo provincial, con el izamiento de la Bandera a media asta y asueto en todos los establecimientos educacionales públicos y privados.