Una mujer de 27 años fue detenida anteanoche en la ciudad de Santa Fe, sospechada de matar de una puñalada en el abdomen a su marido, de 35, durante una discusión ocurrida en la vivienda que ambos compartían, al norte de la capital provincial. Según fuentes del caso, la imputada dijo en sede policial que la víctima, a quien había denunciado varias veces por violencia familiar, había llegado borracho y había golpeado a uno de sus cuatro hijos, por lo que ella tomó un cuchillo de cocina y lo atacó por miedo a que matara al pequeño.
El hecho tuvo lugar alrededor de las 21.30 del lunes en una vivienda ubicada en Monseñor Rodríguez al 6900 del barrio Yapeyú, donde estaba una mujer de 27 años, identificada por las iniciales S. M., junto a sus cuatro hijos de entre 5 y 12 años.
En ese momento ingresó en la finca el padre de los niños y esposo de la mujer, identificado por la Policía como Adrián Jerónimo Álvarez, en aparente estado de ebriedad, según contó la mujer a personal de la comisaría 7ª de la ciudad de Santa Fe.
NI bien entró, insultó a sus hijos y comenzó a golpear con dureza al mayor, identificado como Rodrigo, de 12 años, delante de sus hermanas Ludmila, de 11, Ailén, de 7, y Brisa de 5. Siempre tomando en cuenta los dichos de la imputada, ésta temió por la vida de su hijo mayor, por lo que luego de ver que su esposo hacía oídos sordos a su pedido de que dejara de golpearlo, tomó un cuchillo de cocina y le asestó un puntazo en el lado izquierdo del abdomen.
Tras esto, la mujer tomó a sus cuatro hijos y se fue caminando hasta la comisaría, donde relató lo sucedido. Personal policial pidió dos ambulancias, una para que fuera hasta la vivienda donde se presumía ocurrieron los hechos y otra para que atendiera a los niños, quienes estaban en estado de shock.
Según voceros de la Unidad Regional I, personal médico fue en ambulancia hasta la casa de barrio Yapeyú donde encontró al hombre gravemente herido. El personal sanitario trasladó de urgencia a Adrián Álvarez hasta el hospital Mira y López de la capital provincial, ya que era el nosocomio más cercano, pero la víctima falleció ni bien ingresó al centro de salud, debido a la pérdida de abundante cantidad de sangre.
En tanto, los hijos de Adrián Álvarez fueron atendidos por personal médico de Policía Criminalística, que constató que los pequeños presentaban numerosos indicios de haber sido golpeados, por lo que quedaron a resguardo de la dirección de Minoridad y Familia del gobierno provincial, la que a su vez los entregó a una tía de los niños.
Fuentes allegadas a la causa mencionaron que Álvarez tenía varias denuncias por violencia familiar. Incluso durante un tiempo no pudo acercarse a su casa, luego de una nueva denuncia de su esposa, quien temía por su vida y la de sus hijos. La mujer quedó alojada en la seccional 7ª, con jurisdicción en la zona, al igual que un hermano de la víctima, de 26 años, quien habría estado en la casa al momento del fatal desenlace.
Interviene en el caso el juzgado de instrucción en turno, a cargo de Jorge Pegassano, junto al fiscal Carlos Rolando y la división Homicidios de la Unidad Regional I.
